El tenista serbio Novak Djokovic dijo este domingo que "no es una coincidencia haber ganado el 23 Grand Slam aquí en París" porque "este torneo ha sido siempre" para él "el más duro de ganar".
"Es un sentimiento increíble", afirmó Djokovic en su alocución en la pista tras recibir la Copa de los Mosqueteros de manos del extenista francés Yannick Noah, vencedor en esta pista hace 40 años, en 1983.
Lo conmovedor
"Estoy muy orgulloso" y es un momento de "muchas emociones", añadió Nole, que llevaba una chaqueta de chándal sobre la que había un número 23 con los colores de la bandera de Serbia.
A pesar de que durante este torneo ha tenido sus más y sus menos con parte del público parisino, agradeció en francés a los espectadores haber creado "una atmósfera especial, maravillosa", y "muy, muy especial".
Tras convertirse en el tenista masculino con más victorias en Grand Slam (23, por encima de las 22 de Rafael Nadal), la Federación Francesa de Tenis entregó al serbio una réplica de pequeño tamaño de la Copa de Roland Garros en cuyo zócalo están grabados los años de todas sus victorias en los grandes torneos.