Llega puntual a la cita en el norte de Bogotá. Su saludo paraliza la entrada del Hotel EK donde algunos preparan la cámara de su celular y el valor para pedirle una foto. Carolina promociona su nuevo proyecto, una línea de productos hechos a mano con su marca JapyCrafts, una empresa que produce tejidos, cerámicas, productos en madera y fique para decorar los espacios.
Se une a Mercedes Salazar y Lucas Jaramillo en “Caminos Cruzados”, una edición limitada para Falabella, y se prepara para ponerse en la piel de Julia, el polémico personaje de la serie Nip Tuck, que llegará al Canal Caracol el próximo año.
Llega una adaptación colombiana de la serie norteamericana Nip Tuck, ¿por qué acepta interpretar a Julia?
Siempre me han gustado los personajes complejos, los que tienen verdad, que representan un reto y con los que la gente se puede identificar. Siento que es muy importante que la gente encuentre a la persona, al ser humano detrás del personaje y que no vean simplemente a un héroe o una heroína. He interpretado a muchas heroínas, pero siempre han tenido unas bondades muy necesarias para mí en el momento en que las he interpretado. En el caso de Nip Tuck son los defectos del personaje y su humanidad y sus fallas lo que hicieron que me decidiera por interpretar a Julia.
¿Estuvo en Amas de casa desesperadas, A corazón abierto, una versión de Grey´s Anatomy? ¿Cuál es la magia de participar en estos formatos de series muy exitosas en Estados Unidos y hacerlos a “la colombiana”?
Las historias son universales, muchas de ellas o están en momentos históricos o geográficos, o circunstanciales particulares, lo cual define el interés del público. En el caso de Nip Tuck, Amas de casas desesperadas o Grey´s Anatomy me parece muy interesante que hayan adaptado estas historias a la cultura latinoamericana.
Porque de todas maneras nosotros tenemos una estructura diferente a la cultura norteamericana, vivimos en una cultura cada vez más universal, nuestros niños, nuestros jóvenes tienen un panorama más amplio del mundo hoy. Por ende nuestras historias están mucho más entrelazadas culturalmente, la importancia que tiene de la adaptación es que son personajes que cuentan una misma historia, pero con una comunicación diferente. Acepté participar en Nip Tuck porque tiene una complejidad y un oscuro detrás de los personajes.
A mí me parece importante que este tipo de historias se adapten a nuestra realidad, porque cuando tú las ves en cable las ves lejanas, cuando las adaptas a la forma de ser colombiana y latinoamericana la sientes más propias, y cuando hablo del mismo idioma, no me refiero a que estén en francés, inglés o alemán, es todo un lenguaje de comunicación entonces es súper importante porque se convierte realmente en una historia nueva, en una historia con la que la gente se identifica.
Cirugías, sexo, adicciones ¿Hay escenas difíciles de grabar para usted en la serie?
Sí, se va a ver de todo. Se ha adaptado la historia norteamericana a nuestra idiosincrasia.
¿Y cuál es su opinión de las cirugías, uno de los temas centrales de la serie?
Vivimos en una sociedad donde las cirugías tienen dos lados, tienen un lado muy frívolo y tienen un lado muy humano, creo que los cirujanos tienen un gran talento que se puede aprovechar y respetar, porque son personas que devuelven muchas veces la vida a personas, y la tranquilidad a pacientes que han tenido accidentes, o que han nacido con malformaciones, por ende tienen un talento que muchos deciden aprovechar socialmente. Y está el lado frívolo, de no me gusta quién soy, no me gusta como soy y cambiándome la nariz voy a lograr ser lo que todos esperan de mí, pues la realidad es que cambiando lo físico tú no cambias lo bonito y lo feo que llevas por dentro, simplemente cambias una cosa con la que estás inconforme físicamente.
Y de su paso por La Pista, ¿qué aprendió, ¿se le mediría a presentar otro reality?
La Pista no es un reality es un concurso, que se cuente la historia de los concursantes para que la gente vea su vida, no quiere decir que sea un reality, un reality es donde le ponen conflictos psicológicos, retos de supervivencia a los participantes, empezando que a mí no me gustan los realities, los respeto pero no me gustan. La Pista no es eso, es un concurso.
Me encantó presentarlo, siento que el baile es un arte que tenemos que apoyar mucho más, y al poner mi cara como presentadora tengo que confesar que lo hice por un placer propio, porque me encanta ver bailar, disfrutar de la música, y me parece que me pagaron por pasarla delicioso.
Tiene próximos proyectos como presentadora ¿Qué es lo que más le gusta de esa faceta?
Yo empecé siendo presentadora, así nació realmente mi carrera en televisión, mi noviazgo con los colombianos arrancó en la presentación, en la presentación de un noticiero, por ejemplo, tú no editorializas, tú no debes presentar o plantear como periodista una posición o una postura, mientras que en La Pista, como presentadora, yo era yo, es la primera vez que en Colombia me vieron como soy, riéndome como me río, echando chistes malos, embarrándola, conmovida o de pronto no.
Mientras que en la actuación oxigeno todo, ahí salen las entrañas y lo visceral en mí, porque no hay nada más divertido que jugar a ser alguien diferente a uno. Para mí la actuación es una cosa que está por encima de todo, cuando yo me pongo en los zapatos de la actriz y estoy en un set le rindo un tributo al ser al que estoy interpretando.
¿Y cómo ve el desarrollo del cine y la televisión?
En Estados Unidos, el cine de televisión se está comiendo un poco al cine de la pantalla grande, ¿por qué?, por la misma manera en que nos movemos hoy en día consumimos diferente, la vida va mucho más rápido, estamos bombardeados con información todos los días. La televisión, la gente se mueve tanto afuera todo el tiempo que cuando llega a su casa realmente es el momento de disfrutar de lo que les gusta, ya queremos que nos cuenten historias desde la cama, por ejemplo tú ves HBO, las grandes estrellas del mundo se están pasando a los grandes formatos de televisión, Scorsese se ha pasado a televisión, porque en cine también tienes unos limitantes, tienes que manejar un tiempo, no puedes contar una historia, mientras que en televisión te puedes tomar más el tiempo y lo dosificas. Y en televisión, la telenovela lo vuelve a uno como actor muy mañoso, porque te vuelves práctico, te vuelves efectivo. En unas se puede explorar más que en otras, pero siempre es lo mismo, contar una historia.
¿Woody Allen, Pedro Almodóvar, Quentin Tarantino? ¿Qué directores están en la lista de Carolina Gómez?
Lo que pasa es que los directores son como esos grandes íconos, por ejemplo me soñaría actuar con Tarantino, me soñaría con trabajar con Almodóvar, pero hay muchos actores que han trabajado con Almodóvar, que cuando llegan a trabajar con él, él dice hasta dónde tienen que parar la pestaña. Lo importante es que tengas muy claro qué estás dispuesto a dar por un director, por ejemplo Sharon Stone, decía que en las manos de Bertolucci cualquier cosa. Y de verdad creo que fue de los directores que más cosas le sacó al talento de sus actores y dicen que trabajar con Lars Von Trier es el sueño de la vida, pero todas las actrices que han trabajado con él, no quieren volver a trabajar con él, porque hay directores que te secuestran emocional y psicológicamente.
Yo me sueño con trabajar con un director que logre sacar lo mejor de mí, que si me muero por trabajar con Tarantino, que si me muero por trabajar con Sofia Coppola, claro, obvio. Pero me moría de ganas de trabajar con Carlos Moreno, lo voy a hacer, me moría de ganas de trabajar con Felipe Martínez, con los hermanos Orozco, yo creo que cada director tiene su cuento, por ejemplo con Andrés Marroquín que es uno de los directores de Nip Tuck, yo amo trabajar con Andrés. Me encanta el director de Drive, Nicolas Winding Refn, con Woody Allen me parecería maravilloso trabajar.
Hay un guionista y director muy polémico que es Dago García ¿cómo fue su experiencia personal con Dago?
He trabajado mucho con él en sus historias, no importa si uno aprecia su estilo o no. Todos coincidimos en que Dago es Dago, sabe cómo llegarle al colombiano, sabe cómo contar la idiosincrasia nuestra, sabe cómo hacernos reír, no importa si es bueno, malo o regular según la crítica. Ha contado nuestra idiosincrasia y sabe como contarlo. Punto.
Mamá, actriz, presentadora y ahora empresaria, ¿cómo se desconecta, cuándo saca tiempo para usted?
Yo soy muy inquieta, yo creo que mi hogar es mi punto de desconexión, por momentos he cometido el grave error que cometemos muchos, momentos de mucha productividad, como el cuarto de hora que uno quiere aprovechar, y el error que se comete es que se sumerge uno demasiado en lo profesional, entonces no logra desconectarse, y eso es un error porque el progreso no existe sin balance y el progreso no existe con el mismo, a uno no se le puede olvidar desconectarse y a mí a veces se me olvida, pero mi punto de desconexión real es mi hogar, yo cierro la puerta de mi casa y ya.
Hace poquito pasé por una etapa que estaba lanzando JapyCrafts en Colombia y mi casa se volvió mi oficina, yo estuve siete meses y dele y dele y dele, y llegaba de grabar y seguía trabajando, mi casa era mi oficina. Entonces pierdes tu hogar, y de ahí de verdad me di cuenta que mi desconexión es mi hogar. Es súper importante para mí la ducha, para mí la ducha es el momento zen, hacer ejercicio, hacer yoga, me parece súper rico, a veces tengo así sea un minuto y porque en la ducha estás en el estado más puro en que puedes estar, no estás hablando con nadie y en esos momentos trato de meditar.
¿Ha tenido la oportunidad de trabajar con muchísima gente, cuáles actores colombianos admira?
Cuando estuve estudiando tuve la oportunidad de trabajar con Elena Anaya, la de La piel que habito de Pedro Almodóvar y me pareció una delicia verla trabajando, más como el análisis de lo que hace el otro con su talento, en Colombia he trabajado con actores maravillosos, con Édgar Ramírez, me pareció muy interesante ver su proceso, cuando tú ves una película y ver el resultado de esa película es maravilloso, por ejemplo me encanta Meryl Streep porque todo en su actuación tiene verdad.
Por primera vez actué con Robinson Díaz, un tipo súper interesante, es un hombre muy acertado y es muy generoso trabajando con él, mis dos compañeros en Nip Tuck, Emmanuel Esparza y Michelle Brown, con Nataha Klauss, ella es como un burbuja, como una explosión de ella, me encanta ella como actriz. Hay otros actores como Aida Morales, es increíble, cuando la vi en teatro y se le notaba su formación, se le sale una cosa increíble.
¿Qué es lo más difícil de estar en el mundo del entretenimiento?
Todo tiene sus pros y contras, porque todos los trabajos tienen cosas negativas, hay cosas que debes aprender a manejar en el día a día, no es después, es difícil literalmente tener a tantas personas tocándote, el ser humano necesita, uno tiene un metro cuadrado que le pertenece a uno, es difícil estar todo el tiempo rodeado de gente. Hay mucha interacción y muy poco silencio, es difícil trabajar con poco silencio, mientras más edad tengo más aprecio el silencio.
Lanza JapyCrafts, una línea de diseño de productos hechos a mano. ¿Por qué crear una línea de diseño colombiano?
JapyCraft es un proyecto súper bonito, creo que como colombianos tenemos que recuperar nuestra identidad, siempre miramos al otro lado, hemos tenido un momento donde hemos fortalecido nuestro orgullo patrio y es maravilloso porque los que vivimos nuestra infancia en los ochenta nos enseñaban que lo de afuera era lo mejor, el aspiracional era Mickey Mouse, a uno se le olvidaba que uno cogía un carro y tenía los paisajes más bonitos.
Nos falta como colombianos estar orgullosos de lo que somos, no sabemos muy bien como somos. Los artesanos no son solamente las comunidades indígenas o fuera de la ciudad, el artesano es el que nace en Fontibón y le gusta trabajar con las manos, cada pieza de un artesano es una pieza de lujo. JapyCrafts es un conjunto de todas estas cosas, es coger a algunos artesanos que ya son microempresarios para que podamos lograr que todavía no pueden vivir de su arte logren sacar su talento, que es lo que hacemos nosotros, esto es un gran proyecto de vida, es un proyecto con ánimo de lucro en donde todos ganamos, nosotros lo que queremos hacer es enseñarle el valor de la pieza artesanal.
JapyCraft enaltece el diseño de los artesanos y mostrar lo que tiene Colombia y Falabella es una compañía que le creyó a esto, y le rinde tributo a los artesanos y diseñadores colombianos, entonces a Falabella se le ocurrió esta gran idea “Caminos cruzados” donde participan Mercedes Salazar para intervenir la alfarería y Lucas Jaramillo, que ha sido uno de los grandes precursores de las artesanías en este país.
Lucas Jaramillo me ayudó muchísimo en el desarrollo de mi línea, entonces es una edición limitada que se va a conseguir en Colombia solamente durante cuatro semanas, y para que consumamos nuestro producto interno como lo que es, un producto de lujo. En el extranjero a veces se valora más el trabajo colombiano. Esto no es una organización, una ONG, o una fundación, es un negocio.
Productos de JapyCrafts de Carolina Gómez- Piezas de taracea con fichas de hueso, cacho y macana. Vajilla de Mercedes Salazar.
Nip Tuck, JappyCrafts, ¿qué otros proyectos está preparando? Japycrafts seguirá creciendo, es presente y futuro. Empiezo a hacer una comedia con Carlos Moreno y con Laberinto, es una adaptación de una película argentina que se llama “No sos vos, soy yo”. Es la primera vez que voy a actuar con talento de Caliwood y me parece súper divertido hacer comedia después de hacer este personaje tan denso, me propusieron un corto de una directora joven que se llama Tatiana Kantorovich donde voy a ser un hada, y ahí es muy chistoso ver como te perciben como actor, yo hice Bluff con laberinto, ellos ven un personaje de comedia, tú ves a Dago y me ve como la mamá, o como la teacher de inglés, ves a los hermanos Orozco, me ven oscura y visceral y Tatiana me ve como un hada. ¿Se casó con Borja Aguirre? Sí, tenemos una relación desde hace mucho tiempo y muy consolidada, y estamos felices. Su paso por el reinado, virreina universal de la belleza, muy admirada siempre por todos los colombianos. ¿Qué es la belleza para usted? La belleza siempre se ha percibido como algo muy banal, y el mercado nos trastoca la noción de belleza, tenemos una relación de amor y odio con la palabra, la espiritualidad, la belleza y la estética, son una, como se complementan porque a la larga la belleza es tan necesaria, es el complemento del amor. En el arte hay belleza porque hay creatividad, hay emoción, proyección que genera un objeto. Si vamos a hablar de la belleza física, es algo que hay que saber llevar, llevarlo con gracia, no pretender que la belleza de los cincuenta sea la misma de la de los veinte, porque no lo es, considero que la belleza de los ochenta es la más grandiosa de todas porque trasciende la lisura de la piel y el botox, trasciende todo porque es una cosa de alma y de vida. Y sin belleza el alma sería muy vacía.