Un impactante hecho generó conmoción en una comunidad de Estados Unidos esta semana. Un hombre identificado como George Perrot y que estuvo en la cárcel durante 30 años por una presunta violación quedó en libertad luego de que se determinara su aparente inocencia.
Sin embargo, lo que más llamó la atención es que el sujeto luego de salir de prisión cometió el mismo delito por el que había sido judicializado. Perrot fue condenado a cadena perpetua en el año 1985 tras ser señalado de golpear y abusar sexualmente de una mujer de 78 años.
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Luego de más de tres décadas el programa que busca eximir a los condenados injustamente, 'The Innocence Project' en compañía del Instituto Schuster de Periodismo de Investigación de la Universidad Brandeis, se encargaron de su caso.
Los institutos pudieron comprobar que la sentencia contra George Perrot se basó en pruebas falsas, por lo que fue liberado en 2016.
De acuerdo con medios locales, el sujeto se encuentra ahora bajo investigación por presuntamente violar a una mujer inconsciente, ya que el hombre volvió a ser arrestado después de localizarlo junto a una mujer semidesnuda.
La anciana le comentó a las autoridades que Perrot la drogó, luego se aprovechó de su estado y abusó de ella. No obstante, el acusado se declaró inocente del delito cometido el pasado mes de enero y demandó a la ciudad de Springfield por haberlo procesado ilegalmente por el delito de hace 30 años atrás. Según el fiscal del distrito de Essex, Jonathan W. Blodgett, el implicado está detenido sin derecho a fianza.
Flawed evidence got him freed in 2016 from a rape conviction where he spent 30 years in prison. Now, George Perrot is charged in a sexual assault earlier this year that allegedly involved heroin and an unconscious woman: https://t.co/JKzboo2mAd pic.twitter.com/dYryM1XvSD
— David Hurlburt (@David5TV) 6 de mayo de 2019