Con una votación de 49 votos contra nueve, el Senado de la República ascendió a mayor general al oficial Francisco Patiño.
El general fue relacionado en la investigación por la muerte del joven grafitero Felipe Becerra, ocurrida hace dos años en la localidad de Suba.
Patiño recibió con humildad y sin triunfalismo su notificación. Le agradeció a la senadora Miriam Paredes la presentación que hizo de su hoja de vida.
En la votación estuvieron presentes los padres del grafitero, Liliana Lizarazo y Gustavo Trejos.
Durante la votación el general Patiño se disculpo con el Senador Camilo Romero, quien hizo una férrea oposición al ascenso, Patiño le dijo que lamentaba cualquier malentendido que hubiese llegado a dar a entender que la discusión del ascenso se hubiera convertido en algo personal.
Patiño se refería a un roce entre el uniformado y el senador, que hubo hace una semana, cuando Romero saludó al general y este le respondió "ojalá algún día se haga justicia por todo el daño que usted me ha hecho".
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