El nacimiento del príncipe Jorge, hijo de los duques de Cambridge, ha generado una serie de cambios en la dinámica de la familia real británica.
Uno de los más sonados en los medios de comunicación, ha sido la supuesta expulsión de Lupo, la popular mascota de Guillermo y Catalina.
Fuentes cercanas a la realeza británica aseguran que desde el nacimiento del pequeño, Lupo pasó a manos de James Middleton, hermano de la duquesa. Así las cosas el popular can también estaría bajo el cuidado de la presentadora de tv Donna Air, hermanao de Catalina.
Pese a que la casa real no ha confirmado oficialmente nada, el perro no estuvo presente durante la celebración del día de Navidad en el palacio de Sandringham.
Diarios birtánicos van más allá, aseguran que el veto de Lupo lo habría ordenado la misma Reina Isabel II, según parece para que no causara problemas entre las adoradas mascotas de la reina.
