Voceros de la Universidad Pontifica Bolivariana en Medellín reconocieron haber identificado a dos funcionarios administrativos que participaban en una trama de alteración de notas utilizando recursos de las oficinas de Registro Académico para asegurar el fraude.
“La UPB aclara que esta situación no se debió a un asunto de fraude electrónico externo y que su sistema e historial de notas es totalmente confiable y seguro. La Universidad lamenta y rechaza los hechos de que ha sido víctima. Una vez finalice las investigaciones adoptará las acciones judiciales pertinentes”, explicó la institución a través de un comunicado en el que aseguran que los dos funcionarios implicados han sido apartados de su cargo.
Sin embargo los dos identificados harían parte de un ‘cartel de notas’ dentro de la UPB, con el que se habrían beneficiado varios estudiantes. Los alumnos pudieron pagar entre 500 mil y 1 millón de pesos por la alteración de sus notas, y al parecer el hecho no se produjo solo en la sede de Antioquia, sino también en Bucaramanga y Montería.
