Para contrarrestar las movilizaciones campesinas en Sibaté, municipio ubicado al sur de Bogotá, fue necesario el uso de dos tanques de guerra que recorrieron las calles de la población en la madrugada y mañana del lunes, según denuncian los pobladores. Además de los vehículos hubo presencia militar en el casco urbano lo que intimidó a los ciudadanos. Según las autoridades, el uso de tanquetas militares fue necesaria para contrarrestar los desórdenes que se registraron desde la noche del domingo y que dejaron cuantiosos daños en la Alcaldía y algunos establecimientos comerciales aledaños.
A esta hora en el municipio persisten los bloqueos por el Paro Agrario y más de 300 manifestantes advierten que se dirigirán hacia el sector de Chuzacá, que conecta a Sibaté con la autopista sur de Bogotá. Un bloqueo en esta vía aislaría a la capital por el sur. El alcalde sibateño, Ramiro Ramírez, manifestó a KienyKe que "no sabe quién envió las tanquetas" y que la Alcaldía no llamó al ejército para restablecer el orden público, sino a la Policía. Versiones extraoficiales indican que el desplazamiento de los vehículos fue por orden del Gobierno Nacional.
El mandatario de Sibaté agregó que, si bien respalda la protesta social campesina, luego de los desmanes de anoche pudieron identificar a grupos de "infiltrados" que promovieron los ataques a las instalaciones de la alcaldía. Ciudadanos de este municipio se declararon "indignados" y "preocupados" por el uso en las calles del ejército y de tanques de guerra.
