Con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), la Fundación Saldarriaga Concha implementó en la región colombiana de Montes de María el Sistema Interactivo Transformemos, ganador del Premio Unesco Confucio como el mejor modelo para jóvenes y adultos para la paz, logrando cero deserción y demostrando que en las antiguas zonas de conflicto pueden implementarse procesos educativos formales de calidad, regionalizados y con el empleo de las nuevas tecnologías.
Las mediaciones didácticas impresas e interactivas del Sistema Interactivo Transformemos fueron diseñadas teniendo en cuenta las características culturales, sociales, geográficas y económicas de Montes de María, respondiendo a las necesidades de las comunidades, buscando fortalecer sus potencialidades, e incluyéndolas de forma simultánea en las culturas escrita y digital, de manera que los estudiantes jóvenes y adultos puedan convertirse en generadores de desarrollo y gestores de paz.
[caption id="attachment_715927" align="alignnone" width="1024"]
Giovanny Manrique/Fundación transformemos[/caption]
El sistema funciona sin necesidad de Internet (modalidad offline) y, en las zonas donde se cuenta con este servicio, los estudiantes pueden acceder a la plataforma digital del sistema.
El proyecto se desarrolló en los municipios Los Palmitos, Colosó, Chalán, Toluviejo, Morroa, San Onofre y Ovejas (Sucre), y en El Carmen de Bolívar y San Jacinto (Bolívar), zonas afectadas por el conflicto con las Farc, y que ahora luchan por recuperar la paz y el desarrollo.
[single-related post_id="702725"]
Contó con la participación de 363 estudiantes jóvenes y adultos que adelantaron el proceso de alfabetización o ciclo 1 (grados 1º a 3º de la educación básica primaria); de ellos, el 60% son personas mayores que no habían tenido la oportunidad de acceder a la educación. Tras el proceso se logró cero deserción, constituyéndose en un hito en un país donde la educación de esta población alcanza niveles de abandono escolar de hasta un 40%.
“Entonces yo aprendí esto para salir adelante; yo antes cogía... para sacar cuentas tenía que coger un palito, un poco de palitos, me ponía a contar en los palitos, para no dejarme engañar de ninguno”, relata Héctor de la Rosa, estudiante de Los Palmitos.[caption id="attachment_715930" align="alignnone" width="1024"]
Giovanny Manrique/Fundación transformemos[/caption]
Este sistema de educación permite desarrollar las 800 horas de clase establecidas por el Decreto 1075 de 2015, para el proceso de alfabetización o primer ciclo, con 264 horas presenciales; esto es, con el docente en el aula, haciendo uso de tabletas digitales y proyectores de forma articulada.
“Quiero surgir, quiero salir adelante; aprendí a firmar mi nombre… uno iba a algún lugar y tenía que poner la huella porque no sabía escribir, entonces ahora tomo el lápiz y firmo; ¡es mejor que poner la huella!”, afirmó Ernelda Pérez, estudiante de Colosó.
[single-related post_id="712958"]
Las sesiones de clase, cuyos horarios son establecidos de común acuerdo con los estudiantes, les permiten además adelantar su proceso educativo en forma digital con 136 horas de trabajo en subgrupos y 400 horas de trabajo individual extraclase, todas curricularizadas y respondiendo a los Estándares Básicos de Competencias exigidos por el MEN, de tal forma que quienes terminaron satisfactoriamente el ciclo 1, cuentan con las competencias requeridas hasta el tercer grado de la educación básica primaria.
[caption id="attachment_715931" align="alignnone" width="1024"]
Giovanny Manrique/Fundación transformemos[/caption]
“Del libro de Transformemos me siento orgulloso porque es de nuestra cultura lo que tiene el libro, lo que uno hace, de lo que hay acá en nuestra región; por ejemplo el tabaco que lo cultivo yo, también la yuca, el ñame; todo viene en el libro y ahí puedo aprender a cómo hacer mejor todo”, cuenta Roberto Vergara, también estudiante de Los Palmitos
https://www.youtube.com/watch?v=De048Svf1Vg
