Un nuevo apagón afectó al menos a 16 estados venezolanos, de los 23 que tiene el país, este miércoles 27 de marzo. Cerca de las 13:30 hora local, el servicio eléctrico se suspendió en buena parte de las entidades afectadas. Transcurridas tres horas, no había sido restablecido en la totalidad de los sectores.
En una alocución por el canal del Estado, Venezolana de Televisión, el vicepresidente sectorial de Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez, informó de un presunto nuevo ataque a la central hidroeléctrica Simón Bolívar, ubicada en la represa de Guri (estado Bolívar, sur del país), con características similares al que supuestamente se perpetró el pasado 7 de marzo, cuando Venezuela se sumió en la oscuridad hasta por diez días, en las zonas más afectadas.
Esta vez, recalcó Rodríguez, pudieron solucionar el problema con mayor celeridad, gracias a la experiencia anterior.
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“Así como estamos derrotando la guerra eléctrica, así como nos blindamos para frente a un ataque responder rápidamente y resolverlo, pues así responderemos y venceremos al imperio del mal, al imperio de ‘Darth Bolton’ o de John Vader”, dijo Rodríguez, al referirse a los Estados Unidos y al asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton.
Mientras hablaba, por las calles de Caracas caminaban miles de personas, debido a la consecuente suspensión del servicio de transporte subterráneo. Los peatones esquivaban los vehículos que intentaban circular por las colapsadas calles y avenidas sin semáforos.
Como sucedió el pasado 7 de marzo, las estaciones de servicio que tenían plantas eléctricas o las de aquellas zonas en las que se iba restableciendo el servicio, presentaron largas filas para abastecer de combustible.
Las conexiones móviles, así como la red bancaria, se vieron nuevamente afectadas, lo que, por una parte, volvió a obligar a los caraqueños a buscar señal móvil en puntos estratégicos y, por la otra, a los negocios a cerrar sus puertas.
Intención económica
“La intención no es hacerse de poder político sino con miles de millones de dólares”, denunció Rodríguez durante su alocución, al referirse a un supuesto “plan de ataque” orquestado por el autoproclamado presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, y demás miembros de su partido, Voluntad Popular (VP).
Según informó el ministro, en ese plan estaría involucrado Roberto Marrero, mano derecha de Guaidó y quien fue detenido la madrugada del pasado jueves en Caracas, así como un abogado llamado Juan Planchart, quien además es pariente de Guaidó, y el jefe de un grupo de paramilitares colombianos, Los Rastrojos, cuyo nombre es Wilfrido de Jesús Torres Gómez, alias Necoclí, quien según Rodríguez, era buscado en Colombia y Venezuela por varios delitos. Estos dos últimos también fueron capturados en días previos por las fuerzas de seguridad del Estado venezolano.
De acuerdo con Rodríguez, Los Rastrojos tenían entre sus misiones afectar al sistema eléctrico nacional.
Rodríguez aprovechó la alocución para denunciar, además, corrupción por parte de Juan Guaidó y el líder de Voluntad Popular, Leopoldo López, además de divisiones internas. “Se odian entre ellos (...). Se están matando entre ellos y ya no es para el poder político, es por el billete”, acotó el ministro.
Suspendidas las clases
La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, manifestó que el próximo miércoles quedan suspendidas las clases y actividades laborales por cuenta del apagón en 16 de los 23 estados en el país.
"Seguimos trabajando en la restitución del servicio eléctrico bajo la dirección de Nicolás Maduro, quien valorando el alcance de los daños ocasionados por este ataque terrorista y para facilitar los trabajos, ha prorrogado la suspensión de actividades escolares y laborales este miércoles 27 de marzo", indicó Rodríguez por Twitter.
El vicepresidente sectorial de Comunicación, Cultura y Turismo de Venezuela, Jorge Rodríguez, informó que el apagón se debe a un supuesto nuevo ataque opositor a la central hidroeléctrica Simón Bolívar.
La energía no se ha restablecido desde el pasado lunes.
El apagón de este lunes se sumó al del pasado 7 de marzo que dejó sin electricidad a 22 de los 23 estados venezolanos y que se extendió en algunas zonas del país por 10 días.
