El senador Roy Barreras, del Pacto Histórico, tomó una trascendental decisión en medio de la recta final de la contienda presidencial. Resulta que, a raíz de la filtración de las reuniones estratégicas privadas del Pacto Histórico, el político ha tomado la decisión de hacerse a un lado en la exposición mediática para evitar que se le siga atacando a Gustavo Petro por cuenta suya.
Todo esto se dio, luego de conocerse los videos en los que habla sobre las tácticas “para dividir o no al centro cogiendo al abandonado Fajardo o más bien yéndose de frente contra Alejandro Gaviria” (en su momento). Eso, sin contar otro video en el que se le escucha hablando de la estrategia para evitar el escándalo por la visita a extraditables en las cárceles por parte de algunos dirigentes del Pacto Histórico.
En medio de todo ello, entre todas las críticas, la Revista Semana (quien reveló dicho material) publicó un artículo titulado: “Roy Barreras, ¿un cerebro del mal?”, acusándolo de orquestar la estrategia de desprestigio en contra de otros candidatos a la presidencia. Razón por la cual, el senador ha decidido evitar cualquier espacio en medios de comunicación para frenar los ataques contra Petro a través suyo.
“Me aislo totalmente estos últimos días de campaña para no seguir siendo usado como flanco de ataque contra Gustavo Petro, un hombre bueno y transparente que gobernará a Colombia para bien”, señaló Barreras, aprovechando para enviar una pulla contra Vicky Dávila, a quien acusó de ser el “instrumento” de una campaña de ataques contra el Pacto Histórico.
Así las cosas, el senador Roy Barreras, uno de los hombres fuertes del petrismo en estas elecciones, estará completamente ausente en el plano mediático durante la próxima semana. La recta final de una campaña que tendrá que lidiar con la liberación, prácticamente diaria, de videos de los nueve meses de grabaciones privadas que Semana tendría en su poder.
Es importante mencionar que aunque una gran mayoría de los hechos revelados en los videos no constituirían delito alguno, si ha sido la exposición al desnudo de la planificación estratégica de la campaña de Gustavo Petro. Tema que ha generado gran controversia en un país que ahora conoce, parcialmente, el detrás de cámaras de un periodo electoral que ha estado lleno de ataques desde la derecha e izquierda.
De hecho, el petrismo ya se jugó esta carta y el mismo Alfonso Prada, jefe de debate de Gustavo Petro, destacó que las grabaciones no tienen insultos sino “análisis individuales de carácter estratégico, revisando cómo se van a mover otros candidatos y cómo se va a mover la campaña frente a ellos”.
Sin embargo, aún no es claro cómo podrán esquivar este escándalo, sobre todo por las declaraciones del politólogo Sebastián Guanumen, asesor de la campaña de Petro, quien propuso en una de esas reuniones las estrategias para “hacer caer a Fico en términos de su estética, en términos de su vida personal, de su vida política”.
Así las cosas, aún queda ver cuáles serán los verdaderos efectos de los “Petrovideos” en las elecciones del 19 de junio, que podrían tener resultados bastante cerrados según las encuestas. Lo que sí es cierto, es que desde el movimiento de Gustavo Petro tendrán que hacer un enorme esfuerzo inesperado para hacer el control de la crisis y no perder fuerza electoral.
