Un reciente informe presentado por el Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac), reportó que las muertes en hechos de violencia política registradas en julio presentan una reducción del 12 % frente a las registradas en junio.
Según la Cerac, durante julio se registraron siete muertes producto de 17 acciones de violencia política, aproximadamente una muerte por cada tres acciones violentas. Las víctimas letales en eventos de este tipo de violencia eran principalmente candidatos a las elecciones regionales y miembros de Juntas de Acción Comunal.
Para esa organización, los hechos violentos en contra de líderes políticos tienden a presentar un aumento en años electorales, sin embargo, en lo corrido de 2019 se han registrado 70 muertes producto de hechos de violencia política, 9 % menos que las registradas en el mismo periodo de 2015 con un 77 %, el anterior año con elecciones regionales y locales y 49 % menos que en el mismo periodo de 2011,también un año con elecciones regionales y locales, que registró 137 muertes.
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Además, indicó que los primeros seis meses de 2019 se registró una reducción del 19 % en las muertes en hechos de violencia política frente al mismo periodo de 2018, al pasar de 78 a 63 casos.
Los hechos de violencia política se concentraron en las regiones de El Catatumbo, el Bajo Cauca y el Urabá antioqueños y en los departamentos de Cauca, Valle del Cauca y Nariño en los primeros seis meses del año.
Según explicó, la persistencia de este tipo de violencia en entornos rurales podría explicarse por la disputa de territorios entre grupos armados organizados que buscan el control de la explotación de rentas ilícitas como el narcotráfico, la minería ilegal y la extorsión.
