El paso del huracán Julia sigue siendo noticia por la incertidumbre de la fuerza con la que llegaría a la Costa Caribe y los daños y damnificados que a su paso dejaría; Sin embargo, afortunadamente el ciclón no dejó grandes afectaciones en lo que tiene que ver con la vida de las personas, de acuerdo a las autoridades de gestión del riesgo, San Andrés reportó dos heridos y 103 casas afectadas
Para tener un panorama mejor y estar de la situación, el presidente de la República, Gustavo Petro, viajó este domingo a San Andrés y Providencia, con el objetivo de identificar los daños causados. Así lo dejó en sus redes sociales el mandatario.
"Estoy San Andrés Islas, evaluó daños y sobre todo el sistema de prevención y resiliencia de la Isla".
Para atender las necesidades de la población isleña y del departamento de La Guajira, en la Costa Atlántica, también golpeado por las lluvias y los vientos causados por Julia, el Gobierno dispuso el envío de 23 toneladas de ayuda humanitaria, informó la Fuerza Aérea Colombiana.
Reanudación de vuelos
Por su parte, la Aeronáutica Civil informó que tras verificar las condiciones de seguridad, hoy se reactivaron las operaciones aéreas en los aeropuertos de San Andrés y de Providencia, que volvieron a la normalidad tras la suspensión ordenada el pasado viernes debido al paso del huracán.
Durante los dos días que el tráfico aéreo estuvo suspendido en el archipiélago debido al paso de Julia fueron cancelados 45 vuelos y 8.864 pasajeros fueron reacomodados, informó la Aeronáutica Civil en un comunicado.
Se calcula que entre este domingo y el lunes cerca de 6.430 pasajeros salgan de la isla en 41 vuelos y cerca de 7.000 viajeros lleguen en las próximas horas.
Julia se ha debilitado hasta convertirse en una tormenta tropical que atraviesa Centroamérica, donde también ha causado graves estragos, especialmente en Nicaragua, hacia donde se dirigió tras pasar por San Andrés y Providencia.
En este sentido, la región Caribe de Nicaragua, que abarca casi el 50 % de la extensión del país y donde habita aproximadamente un millón de personas, quedó sin energía eléctrica y sin telecomunicaciones.
