Este jueves 29 de abril la Alcaldía de Cali decidió retirar la estatua de Sebastián de Belalcázar que fue derribada por miembros del pueblo indígena Misak, el pasado 28 de abril durante la jornada de paro nacional.
La Alcaldía de Cali anunció que la estructura fue retirada del lugar en el que permanecía para evitar que algún ciudadano caleño tuviera algún tipo de accidente.
"La Administración Distrital retira la estatua de Sebastián de Belalcázar por daños físicos en su estructura, que representaba un riesgo para la comunidad del sector", anunció la Alcaldía a través de sus redes sociales.
Aunque la administración no dijo si retirará la estatua de manera permanente o solo hasta que se arreglen los daños, la noticia fue bien recibida por la ciudadanía. Algunos incluso solicitaron que en su reemplazo ubiquen algún tipo de monumento que ha haga alusión a la cultura caleña.
"Me alegra, ahora si, coloquen algo que realmente represente la cultura caleña", escribió un usuario de la red social.
"Aprovechen y la dejan en una bodega. El genocida ese no nos representa. Es hora de re-significar el espacio público con figuras que sí nos representen. No insistan más y escuchen a la ciudadanía", "Empieza la renovación de las viejas formas! No olvidar jamas la historia!", son otros de los comentarios que hicieron los caleños respecto al anuncio de la Alcaldía.
Derrumban la estatua de Sebastián de Belalcázar
Como símbolo de reivindicación con los pueblos indígenas, miembros de la comunidad Misak llegaron a primera hora del pasado 28 de abril hasta el oeste de la capital del Valle del Cauca, para derribar la estatua de Sebastián de Belalcázar.
Los indígenas señalaron que era una reivindicación frente a un "genocida". Con este hecho iniciaron las protestas del paro nacional en Cali, donde se registraron masivas marchas en las calles de la ciudad, así como diferentes actos culturales y algunos episodios de vandalismo que lograron empañar un poco la manifestación social.
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Un hecho similar se registró en septiembre del año pasado. En medio de una manifestación que se desarrollaba en la ciudad de Popayán, Cauca, un grupo de indígenas de la comunidad Misak llegó hasta la estatua de Sebastián de Belalcázar y la derrumbó del morro de Tulcán.
Estos dos actos simbólicos han sido celebrados por muchos colombianos que han asegurado que es momento de reivindicarse con los pueblos indígenas y "re-significar el espacio público".
