De moneda en moneda, personas tratan de ganarse el sustendo diario para de su alimentación, arriendo, debido a la falta de oportunidades.
Desde personas recién graduadas hasta artistas, ven el los semáforos de la capital una luz de esperanza para seguir adelante.
Toda moneda cuenta desde 50, 100, 200 pesos se logra hacerse con un sustento no simplemente de para la persona que esta trabajando sino también para su familia.
Personas que día a día buscan como pagar las cuentas, transporte, lo que se debe en la tienda.
En las calles podemos encontrar personas con habilidades excepcionales como lavándose la cara con vidrios, él es Kennedy Sinisterra artista callejero.
Desde arte también las personas buscan oportunidades.
El clan depredador patrulla los semáforos de la capital día y noche brindando un espectáculo digno de una obra de teatro.
Más de 4 años brindándole a las calles un espectáculo, con un traje que llega a pesar 12 kilos, confeccionado por el mismo, él es Felipe Pastrana (El Depredador de la calle).
Estas monedas para muchas personas pueden ser insignificante, una molestia para su bolsillo, pero para estas personas que trabajan honradamente son una 'bendición'.
De monedita en monedita se hace el diario, que es lo que uno necesita, trabajar para suplir sus necesidades.
Ser limpiavidrios no es fácil, es un trabajo donde muchas veces no recibes monedas sino lo que recibes son insultos, tanto agresiones físicas como verbales.
Todas estas personas, desde desplazados, profesionales, migrantes, desempleados hacen parte de esta comunidad que trabaja honradamente en las calles.