En la noche del pasado 8 de julio un taxista fue asesinado en el sur de Bogotá. Las autoridades ya iniciaron la debida investigación por el homicidio del hombre de 46 años en la vereda La Requilina, en la localidad de Usme.
Según las entidades encargadas de la investigación, el hecho se presentó por un posible atraco fallido alrededor de las 10:00 de la noche cuando el conductor transitaba por una zona poco iluminada.
La Policía maneja la hipótesis de que el taxista había dejado un servicio en una finca y minutos después fue interceptado por un delincuente en moto, quien aparentemente quería robarlo. A pesar de eso, en el taxi que cayó al barranco se encontraron las pertenencias de la víctima, por lo que esta teoría aún se sigue investigando.
Otra de las hipótesis es que los asesinos se hicieron pasar por pasajeros y le dispararon en una zona boscosa. Después del impacto con un arma de fuego, dejaron rodando el vehículo con la víctima adentro, el cual terminó cayendo a un barranco.
La Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog) llegó al lugar para auxiliar al hombre, el cual fue trasladado al CAMI de Usme, cerca a Santa Librada. Allí fue intervenido quirúrgicamente, pero esos esfuerzos no evitaron que el conductor falleciera por las heridas del disparo que recibió en su cabeza.
Los habitantes del sector e incluso el gremio de taxistas quedaron preocupados con esta situación de inseguridad en la vereda. “Este sector es complicado, más en las horas de la noche”, explicó un ciudadano.
El hombre fue identificado como Odilo Mosquera Erreño, quien llevaba seis meses trabajando en el taxi donde fue asesinado. Sin embargo, la mayor parte de su vida se desempeñó como conductor de servicio público.
Con respecto a los niveles de inseguridad en Usme, la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia tiene unas estadísticas que hablan al respecto.
El informe más reciente corresponde al mes de mayo del presente año y en él se ve cómo los homicidios incrementaron en comparación con el mes anterior. En abril hubo 87 casos de asesinatos en Bogotá mientras que en mayo hubo 117.
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Hablando puntualmente de la localidad de Usme, las cifras revelan algo contrario a lo que aseguran los habitantes de la vereda La Requilina. En esta zona de la ciudad los homicidios disminuyeron en un 44%, pero el panorama completo de Bogotá reflejó un incremento del 14,7%.
Con respecto a los atracos, las cifras son mucho más altas. En mayo de este año se presentaron 8.235 casos de hurto a personas mientras que en abril se dieron 6.884. En este caso la inseguridad incrementó en un 61,8%, siendo Usme una de las zonas más afectadas con un aumento de robos del 52%.