Al parecer algunas grandes estrellas de Hollywood no solo le dan vida personajes ficticios en la gran pantalla, también en la realidad crean un alter ego para ocultar sus más ínfimas perversiones, un machismo exacerbado y acosos descarados.
Una mujer, asistente de la película Going in Style en la que participaron Michael Cain, Alan Arkin y Morgan Freeman, contó que durante esa producción, Freeman le hacía miradas lascivas, intentaba tocarla y en una ocasión intentó levantarle la falda mientras le preguntaba si llevaba ropa interior.
El indicio del posible acoso laboral que el actor afroamericano ejercía contra las mujeres de la compañía Revelations Entertainment, le surgió a la periodista Chloe Melas de CNN durante un viaje comercial para la cobertura promocional de la película Giong in Style.
Melas, quien realizó la investigación y escribió el reportaje, narró que durante ese viaje estaba embarazada y, en un momento con Freeman junto a Lori McCreary, el actor le tomó la mano, la sostuvo entres su dedos, la miró de arriba a abajo y al verle la barriga le dijo, "Estás madura, ojalá estuviera yo ahí".
La periodista empezó a indagar sobre los hechos y encontró que había más testimonios de mujeres que habían estado con Freeman y habían presenciado situaciones de acoso, en total fueron 8 las mujeres presuntamente acosadas.
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Tres reporteras que cubrían las producciones de Freeman dijeron que durante sus viajes les hacia comentarios que las hacían sentir incomodas, sobre su cuerpo o su vestimenta. De hecho, algunas empleadas de las producciones cinematográficas del actor, dijeron verse obligadas a suspender ciertas prendas de su vestuario para evitar los comentarios, como dejar de usar faldas y escotes.
De hecho la misma empresa podría haber sido negligente frente al caso de Morgan Freeman. CNN y Warner Bross, a la cual pertenece la película durante la cual se presentó el acoso a la periodista, son propiedades de Time Warner, por tanto, prácticamente compañías hermanas. Sin embargo, eso no se sintió así al momento de pedir explicaciones. Se contactaron con Warner y esta les contestó que no podían confirmar el relato porque los trabajadores no habían presenciado el hecho o no lo recordaban.
Morgan Freeman junto a su amigo Lori McCreary fundaron la compañía Revelations Entertainment que cuenta con títulos como Madame Secretary, documentales como la Historia de Dios, Hombre vs. Universo y otra cantidad de grandes producciones cinematográficas. Pero al interior, parecer que su ambiente no era tan artístico.
En el reportaje de CNN se señala que los empleados, algunos, describen el ambiente como tóxico y nocivo. Uno de los funcionarios relató que en un cumpleaños de Freeman, se reunieron 30 empleados para celebrar en la oficina, pero entre ellos había muchas mujeres y varias de ellas eran nuevas empleadas. Al inicio de la reunión, Freeman les pidió que conformaran un círculo y al cabo de esto, empezó a caminar frente a cada persona, se detenía a las mujeres, acercaba su cara a poco más de un centímetro y las miraba de arriba a abajo sin decir nada.
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Esos son los comportamientos que hoy involucran al actor con acoso sexual a las mujeres y aprovecharse de su posición para intimidar. El actor, ganador de un Oscar a mejor actor y que cumplirá 80 años la próxima semana tendrá que extender la respuesta que ha dado frente a estos hechos.
Al enterarse del reportaje, Morgan Freeman dijo a la misma cadena mediática que "cualquiera que me conozca o haya trabajado conmigo sabe que no soy alguien que ofendería intencionalmente o haría que alguien se sintiera incómodo intencionalmente".
Morgan Freeman se suma a ese vergonzoso paseo de la fama en el que se han visto involucrados otros actores como Gary Oldman, James Franco, Kevin Spacey, Johnny Deep y otros más Michael Douglas. No hay que desconocer que los casos no han sido juzgados hasta el momento, ni se ha comprobado su culpabilidad. Sin embargo, no se puede ignorar a quienes afirman ser víctimas de este flagelo.
