Aunque Félix de Bedout es uno de esos tipos ajenos a la formalidad, no tuvo más camino que aceptar la invitación a almorzar que un grupo de periodistas le hizo para despedirlo. Cecilia Orozco, Diana Calderón, Karina Chalita, Carolina Sánchez, Darío Restrepo, Gustavo Gómez, Camilo Durán y Vladdo acompañaron al curtido periodista y a su esposa, Patricia, en una charla muy animada cuya grabación, de existir, le produciría cálculos renales a José Obdulio Gaviria. El encuentro fue en el nuevo restaurante de Harry Sasson.
En la mesa de al lado, un grupo de señoras “paraban oreja”, mientras los periodistas conversaban y seguían vía Twitter los pormenores de la fallida versión libre del ex presidente Uribe en la Comisión de Acusaciones. Cerca del postre, una de las señoras se acercó y le dijo a Vladdo: “El hecho de que usted le dé tanto palo a Enriquito no quiere decir que no me vaya a saludar”. Vladdo quedó frío. No la reconoció. La señora, entonces, le dijo: “Hace 30 años me acuesto con Enrique”. Era Liliana Sánchez, esposa del candidato a la alcaldía de Bogotá Enrique Peñalosa. Hubo abrazo, pico, despedida y buen humor de parte y parte.
A medio camino entre el postre y el café, Vladdo sacó su libreta y comenzó a hacer una caricatura de regalo para Félix. Una vez terminada y comentada por todos, Félix se la entregó a su esposa que, entre otras, confesó que la persona más feliz con la ida de su esposo a Univisión no era ninguno de los discípulos del furibismo: era ella, porque a la familia le convenía mucho el cambio de aires.
A la salida, uno de los invitados (periodista al fin y al cabo), sacó el celular y le pidió a Félix que se tomara una foto con la caricatura y el resultado es este, con todo y frase del Félix de papel y tinta saliendo para Miami: “Es que Colombia sin Uribe no es igual…”.
Vladdo elaborando el retrato de Félix.
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