DIEZ MANDAMIENTOS PARA UN PAÍS DE MISERABLES

Vie, 07/03/2014 - 11:11
En el decálogo consignado en el capítulo 20 del libro de Éxodo se proscriben algunas de las pulsiones más comunes del animal humano: mentira, codicia, avaricia, violencia, envidia, entre otras. Si
En el decálogo consignado en el capítulo 20 del libro de Éxodo se proscriben algunas de las pulsiones más comunes del animal humano: mentira, codicia, avaricia, violencia, envidia, entre otras. Si de animales se trata, en Colombia tenemos una variedad incomparable gobernándonos: ratas, micos, elefantes, lagartos, buitres, burros, gusanos... La lista es interminable. Aunque en tiempos de campañas electorales los candidatos se empecinan en  diferenciarse de sus contrincantes utilizando las más vergonzosas estratagemas discursivas y publicitarias, sabemos que cuando la contienda haya terminado todos se cobijarán con el mismo harapo; pese a eso hay un considerable número de "ciudadanos" que abdican su voluntad a los mismos de siempre sin pensar en las consecuencias que su elección pueda acarrear para el presente y futuro de la nación: los más mediáticos, los de un slogan llamativo, los más carismáticos, los ungidos por el Mesías de poncho, carriel y sombrero aguadeño, los que la Hermana Piraquive ordene o en el peor de los casos los que repartan guaro y lechona a diestra y siniestra. Con el ánimo de contribuir a la configuración de una "ética pública" para nuestros gobernantes  y legisladores actuales y futuros, así como también para los ciudadanos a los que el país les importa un bledo, propongo los diez mandamientos que se deben seguir para mantener a Colombia presa de la miseria y de esta manera evitar el surgimiento de una nueva generación de ciudadanos con conciencia crítica y convencidos de la necesidad de avanzar en acciones concretas para reorientar los destinos de nuestro país con el propósito de dejarle a las futuras generaciones una Colombia reconciliada con su sangrienta e ignominiosa historia. Sin más, a continuación los diez mandamientos para quienes se quieran seguir defecando en el país del Sagrado Corazón de Jesús: 1. Amarás a Alvaro Uribe Vélez con sus "tres huevitos" y a los títeres "impolutos" que  escoja para su show del momento sobre todas las cosas, así  las "venganzas criminales" se empecinen contra él y los suyos. 2. Usarás el nombre de la Democracia en vano. 3. Santificarás la fiesta electoral con aguardiente y lechona para los incautos votantes. 4. Honrarás a los Padres de la Patria aprobando el merecido aumento a su injusto salario. 5. Aniquilarás cualquier expresión que huela a izquierda: indígenas, negros, campesinos, estudiantes, sindicalistas, miembros de la comunidad LGBTI, defensores de derechos humanos, ambientalistas, ateos y cualquier facineroso que atente contra el statu quo. 6. Santificarás el buen juicio del Procurador Alejandro Ordoñez, adalid de la pureza y las sanas costumbres democráticas. 7. Acudirás masivamente a las urnas para que con tu voto los Padres de la Patria repartan el erario según sus prístinos intereses oscuros y su malevolente sabiduría. 8. Levantarás falso testimonio en contra de tus adversarios e intervendrás sus comunicaciones si es necesario -y si no también porque nunca sabrás cuándo la información te sea útil- para orquestar tu plan patriota. 9. No considerarás ninguna forma decente de hacer política. 10. Entregarás irrestrictamente los frutos de tu tierra a las multinacionales en acción de gracias por exterminar a tanto indio, negro y comunista que atenta contra los designios de la divina providencia del libre mercado. Si así lo hicieres que Dios y la Patria os lo premien, si no que él y ella os lo demanden.
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