El legado de los "Fantoches"

El hombre “fantoche” un mal contemporáneo, esta clase de hombres que deambulan sueltos por las calles en acecho de su próxima víctima se encuentran completamente vigentes y se los puede encontrar en diversas edades, sin embargo responden a unas características comunes, una de las principales es la de creer tener el poder sobrenatural de detener el paso del tiempo por lo cual sin ni siquiera inmutarse a pesar de acercarse a los 40 (aunque también se los encuentra de veinte en adelante) hacen alarde de sus conocimientos en el arte de la coquetería para intentar cazar a su próxima víctima a quien fácilmente le doblan la edad y hasta de pronto el peso, después de todo para quienes se encuentran en este cada vez más grande consideran a las mujeres meras victimas de sus considerados “irresistibles” encantos que en muchos de los casos son bastante cuestionables. Si usted ha llegado a estar cerca de uno de ellos reconocerá fácilmente dichas características, como por ejemplo exhiben un interés desmedido por la ingesta de alcohol e incitaran animadamente a quienes se encuentran a su alrededor el consumo desmedido de este, si están en un grupo de amigos todos hombres harán alarde de lo que han hecho y de lo que han dejado de hacer, no tendrán reparo en hablar de carros, de dinero y de cuanta cosa superficial acuda a su mente, como por ejemplo de si juanita esta buena o no. Y si por el contrario han de encontrarse en un grupo mixto de mujeres y hombres los más lagartones y atrevidos harán alarde de cuanta cosa material se les ocurra decir que poseen sin importar que sea en muchos de los casos una total mentira, animarán a los participantes de la reunión a escuchar música movida con el despropósito de cometer la osadía de pretender que tienen algún don artístico para el baile lo cual termina siendo un rotundo fracaso ante lo cual proseguirá sirviendo una ronda de la bebida alcohólica que estén ingiriendo cabe anotar que su bebida favorita es el aguardiente más conocido como “guaro” puesto que no se sabe de dónde pero tienen muy arraigada la idea de que el “guaro” con las mujeres termina siendo una maravillosa combinación. No cabe duda que tienen épocas especiales en las que el hombre fantoche se va de cacería incrementando su actividad en la época de vacaciones decembrinas en las cuales cualquier actividad se convierte el anzuelo perfecto para este tipo de personajes, así que mujeres a andar con el ojo bien abierto y los oídos despiertos a no dejarse endulzar el oído puesto estos personajes son de los que comen y dejan el cadáver de su víctima por ahí para que otros gallinazos hagan lo suyo.