Para finales de 1964, meses después del estallido de la beatlemanía a este lado del océano, el nicho musical de la época, que se limitaba a canciones pop ‘convenidas’ entre disqueras, facciones conservadores y dj’s, intentaba levantarse del casi knock out en el que los cuatro de Liverpool lo habían sumido. Para ese entonces resaltaban grupos vocales y conjuntos efímeros y solistas que evocaban el rock rebelde de finales de los 50’s con una apariencia demasiado acomodada a las nuevas reglas, y que pasaban por el firmamento del estrellato fugazmente.
Pero destacaba la mano firme y serena del grupo de la Motown, que trabajaba con artistas afrodescendientes, lo que le permitió tener un mercado exclusivo y asegurado, llegando incluso también a copar una audiencia importante del público blanco en los Estados Unidos.
Con esta premisa, la Motown entregó al mundo una generación de legendarios intérpretes y compositores, entre los que se cuentan Stevie Wonder, Diana Ross, los Jackson Five y The Temptations.
Estos últimos, quienes a la postre se convertirían (según muchos) en la gran influencia del Soul de todos los tiempos, tenían en su haber un repertorio compuesto por el gran Smokey Robinson (letrista principal de la Motown e integrante del también grupo vocal The Miracles). Su estilo vocal y la vistosidad de su acto (sus integrantes además de ser cantantes eran bailarines, montando elaboradas coreografías para sus presentaciones) les garantizaron no solo figurar en la constelación de estrellas Motown, sino trascender en la historia de la música con una carrera que ha perdurado a través de los años hasta nuestros días.
En diciembre del ’64 se edita el sencillo ‘My girl’, compuesto por Robinson, inspirado en su esposa y que puso un punto de inflexión en la carrera de los Temptation, colocándolos en la cima del estrellato, ya que para la primera semana de Marzo del ’65, llegaría a la cima del Top 100 de Billboard (con una permanencia de 13 semanas en listados), ganándole el duelo a Gary Lewis con su ‘Diamond Ring’ y dando un respiro a los frenéticos beatlemaniácos que pujaban por un ‘Eight Days a week’ que en una semana saltaba de la 19ª a la 5ª posición del mismo conteo.
‘My girl’ es de esas canciones que destacan entre las demás del ritmo Soul, no solo por su riqueza melódica, sino por su matiz emocional y melancólico que evoca un sentimiento más allá del amor ingenuo e incondicional, que ha permitido que sea escuchada e incluso readaptada por varias generaciones. The Mamas and the Papas y Otis Reding se cuentan entre sus grandes reintérpretes.
La canción habla sobre un hombre que siente un amor incondicional hacia una mujer, y que a través de la letra se lo expresa haciéndola ver como el camino hacia la felicidad verdadera, más allá de lo material y de las cosas que se pueden asociar a la alegría.
Toda una oda a la cursilería, dirían unos, toda una joya de la corona, para los herederos del Soul.
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La 'chica' más querida del soul
Jue, 18/06/2015 - 10:47
Para finales de 1964, meses después del estallido de la beatlemanía a este lado del océa