Fuera Electricaribe: ¡en esta pelea no estamos solos!

Sáb, 01/09/2018 - 06:39
Pocos temas han logrado unirnos de tal forma a los ciudadanos como el desastre de Electricaribe y el rechazo al aumento en las tarifas de energía. Hace apenas unos seis años, para una persona del in
Pocos temas han logrado unirnos de tal forma a los ciudadanos como el desastre de Electricaribe y el rechazo al aumento en las tarifas de energía. Hace apenas unos seis años, para una persona del interior del país la pesadilla energética del caribe era ajena y distante. Hoy la mayoría de colombianos entienden la bomba de tiempo en la que se ha convertido esa empresa y cómo el Estado tuvo que intervenir antes de que hubiera un apagón en los siete departamentos de la costa caribe. Electricaribe lleva años y años tomando del pelo al Estado colombiano porque sabe que es su deber garantizar los servicios públicos a los ciudadanos. En más de una década no hicieron las inversiones necesarias para mejorar la red eléctrica y por eso los constantes cortes de luz, la quema de electrodomésticos y hasta la pérdida de vidas humanas. En cambio, se dedicaron a captar rentas del Estado, es decir, cobrar el cheque y cruzarse de brazos. Un ejemplo claro de lo que han hecho lo demostró la Contraloría. El ente de control reveló que entre los años 2015 y 2016, Electricaribe se quedó con más de 78 mil millones destinados a los subsidios para estratos 1 y 2. No solamente eso, una indagación preliminar de años anteriores dice que la empresa se habría apropiado de 216 mil millones más. ¡Bandidos! No hay otra palabra para describirlos y me quedo corto. Por lo anterior, porque logramos visibilizar esta problemática para que todos los colombianos entendieran la grave crisis que vivíamos en la costa y, además, porque casi se apaga la región, el gobierno nacional intervino en noviembre de 2016 a Electricaribe. Desde ese momento hasta la fecha, el Estado le ha prestado a la empresa en intervención más de $270 mil millones para asegurar el suministro eléctrico, pero no es suficiente. Esperan recibir otro crédito por $753 mil millones para financiar la inversión en redes y garantizar el fluido eléctrico en el caribe colombiano. Como si los costeños ya no tuviéramos suficiente con una empresa abusadora, recientemente la Creg sacó una reglamentación perversa en la que nos aplican a los usuarios un aumento en la tarifa para pagar las inversiones de los nuevos operadores. Y aquí de nuevo lograron que todos los colombianos nos uniéramos para gritarles a una sola voz: ¡No permitiremos que aumenten las tarifas de energía! En el debate de control político que realizamos con la bancada caribe el pasado miércoles en el Senado, no solo nosotros como representantes de la costa sino senadores de todas las regiones del país rechazaron el alza en las tarifas. Además, llegamos a unas conclusiones muy concretas que se las planteamos al gobierno nacional, en cabeza de la Ministra de Minas y Energía, María Fernanda Suárez. Una de las propuestas que más caló es que, ante la entrada del nuevo operador que reemplazará a Electricaribe, pensemos en un modelo mixto. Es decir, por un lado, un socio privado estratégico con músculo financiero para hacer las inversiones requeridas y, por el otro, el Estado invirtiendo y velando por los recursos públicos. Frente a esta alternativa, el ex presidente Álvaro Uribe señaló que se podría pensar en una fórmula en la que el socio privado ponga los recursos y el aporte estatal inicie cuando se generen utilidades con capitalización de impuestos. En la otra orilla, el senador Jorge Robledo, plantea usar parte de los $2 billones que recibe la costa en regalías para las inversiones que la red eléctrica necesita, esto bajo un modelo en el que el operador sea 100% estatal y se comprometa a invertir los recursos públicos para solventar la crisis actual. Nosotros consideramos que la mejor alternativa sería un modelo mixto, pero además ponemos sobre la mesa tres propuestas para que el Estado tenga fuentes de financiación y no se toque el bolsillo de los colombianos. La primera es que se destine un porcentaje de los recursos de los fondos del Ministerio de Minas para el mejoramiento de la infraestructura eléctrica. La segunda es que el gobierno, a través de un Conpes, asigne recursos del presupuesto nacional para hacer las inversiones necesarias. Y tercero, radicaremos en los próximos días con el senador José David Name un proyecto de ley encaminado a que una parte de los recursos del cargo por confiabilidad, cargo que hoy pagamos todos los colombianos en la tarifa de la luz y se les entrega a las generadoras, se destine a invertir en las redes y garantizar el servicio de energía en el caribe colombiano. Los costeños hemos sido víctimas de Electricaribe por sus constantes abusos, pero también de algunos funcionarios del Estado por omisión, pues dejaron que esa empresa hiciera y deshiciera en nuestro país. Para colmo de males, Gas Natural Fenosa, la dueña de Electricaribe, trata de intimidarnos demandando a la nación, cuando han sido ellos los que se han burlado de los usuarios y del propio gobierno nacional. ¡Los pájaros tirándole a las escopetas! Afortunadamente, hoy los colombianos entienden la cruz que hemos tenido que cargar y se solidarizan con nosotros. La unión que logramos ver en el Senado el martes pasado, cuando líderes de todas las regiones nos respaldaron en nuestro clamor, se siente también en las calles, donde ciudadanos de cualquier parte del país han rechazado los atropellos a la región caribe y se oponen a que seamos los costeños los que paguemos las deudas de Electricaribe. Solo una cosa me resta por decir, ¡gracias a Dios, en esta pelea no estamos solos!  
Más KienyKe
La misión, que también contó con apoyo dela iglesia católica, permitió que una persona retenida por el Frente 24, se reuniera de nuevo con su familia.
Desde Galán hasta el Congreso se manifestaron tras la decisión del gobierno nacional.
Los enfrentamientos se presentaron en el municipio de Chaparral, departamento del Tolima.
La decisión se dio luego de que Javier Milei llamara a Gustavo Petro “asesino terrorista" en una entrevista.