Gunpei Yokoi es un poco conocido genio de los juguetes para niños y de inventos que revolucionaron los videojuegos. A él le atribuyen el éxito de la compañía Nintendo al construir varios de los aparatos que internacionalizaron la marca.
Nació el 10 de septiembre de 1941, en Kioto, Japón, justo en el momento en el que la Segunda Guerra Mundial llegaba a su auge. Sus primeros años tuvo una vida precaria aunque nunca le faltó su alimento porque el trabajo de médico de su papá le permitió seguir empleado durante esos años.
Desde pequeño se destacó por inventar diversas cosas, hasta sus propios juguetes. Estudió ingeniería electrónica en la Universidad Doshisha e ingresó, en 1965, a trabajar a la que sería su segunda casa Nintendo para desempeñarse como operario. Una empresa que hasta ese momento solo producía cartas y algunos fracasos de innovación.
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Era tan diestro para ese trabajo mecánico que le sobraba tiempo para fabricar sus propios inventos. Uno de ellos fue un brazo de varas extensible para alcanzar cosas a corta distancia. Hiroshi Yamauchi, presidente de la compañía, encontró ese brazo un día y lo llamó a su oficina para ver las posibilidades de producir ese juguete en serie.
La idea fue bien recibida por el público y Nintendo decidió continuar con la producción de juguetes ideados por Gunpei Yokoi. Entre ellos rompecabezas, un aspirador a distancia, una máquina lanza pelotas y un Tester Love, un aparato para adultos que parecía una medidor de voltaje, con el que las personas podían medir qué tanta afinidad tenían.
Pero fue hasta 1974, cuando Gunpei Yonkoi iba en un tren y se quedó absorto con un hombre que se distraía jugando con una calculadora, en ese momento se le ocurrió que podría usar ese ejemplo para convertirlo en un objeto portable con juegos. La idea se la transmitió a su compañero Shigeru Miyamoto y desarrollaron el juego de Donkey Kong.
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El éxito fue rotundo, 12 millones vendidos en Japón y más de 30 millones en el mundo. De hecho, en una de las series se creó el Double Screen, que luego inspiró la creación del Nintendo DS, hasta transformarse en el GameBoy, el más famoso de sus desarrollos.
Fue quizá esa genialidad la que lo llevó a su fracaso. Creó la VirtualBoy, una consola similar a las actuales gafas de realidad virtual que era en un gran aparato, pero al mandarlo al mercado no fue bien recibido y terminó, afirman algunos, con su puesto dentro de la compañía después de 30 años de servicio.
Murió finalmente el 4 de octubre de 1997 en un trágico accidente de automóvil. Él estaba revisando su carro cuando fue chocado por un camión, luego llegó otro auto y los chocó por segunda vez. Murió tras dos horas en el hospital.
