La historia las registra desde sus inicios, originales, únicas, trascendentales, importantes y determinantes, en todas las áreas, profesiones, confesiones, las de aquí, también las de allá, huellas imborrables, protagonismo en la sociedad, discretas algunas, empoderadas todas, voces que le han gritado al mundo que su rol es decisivo y que nacieron para transformarlo, crearlo, mejorarlo, hacerlo todo nuevo y bueno. Mujeres dueñas de la gloria.
María y su vientre bendito, nos regaló a Jesucristo, como ella, muchas más luchadoras, trabajadoras, ejemplo, modelo, inspiración.
El arte, la ciencia, cultura, política, mundo empresarial, construcción de hogar, guía espiritual, al frente de estados, liderando ,alcanzando metas, proponiendo ideas, manos laboriosas, inteligencia suprema, a veces valoradas, muchas veces marginadas ,relegadas, quizá por un viejo temor de reconocer que ellas siempre todo lo que han hecho, es mejor.
Marie Curie, Rosa Parks, Rosalind Franklin, científicas, artistas, modistas, astronautas, investigadoras, tejedoras de grandes sociedades, cerebros brillantes, rostros bellos, causas justas, hacen parte de una linda y destacada galería que sin duda han logrado que hoy tengamos una mejor vida.
Cleopatra, Valentina Tereshkova, Teresa de Calcuta, Marilyn Monroe, Virginia Woolf, Juana de Arco, Isabel la Católica, Ana Frank, Eva Perón ,Frida Kahlo, Margaret Thatcher, Golda Meir, Rigoberta Menchú, Ángela Merkel, Indira Gandhi, Manuela Beltrán, Policarpa Salavarrieta, Gabriela Mistral, todas capaces, llenas de intelecto, soñaron, trabajaron, se esforzaron y lo lograron.
Impulsoras de las grandes reivindicaciones, protagonistas de las más importantes conquistas de la humanidad de sobradas condiciones ,excelsas virtudes, destacados logros y un papel superlativo, que ha demostrado desde el primer día, del primer siglo, que nada les queda grande, que lo que se proponen lo logran y que todo está a su alcance.
Este, es el momento de las mujeres, las madres, soñadoras, dadoras de vida, las que inspiran cantos y poesías, las de manos que no se cansan, las guerreras, las que entienden el poder de la alabanza, las que saben lo que es lograr hazañas, para las que no han recibido nada regalado, pues todo con sus capacidades se lo han ganado, los tiempos de hoy hasta la saciedad han demostrado, que las mujeres para beneficio de la humanidad, han dado todo y se siguen entregando con el alma por una tierra buena, de oportunidades, de esperanzas, de derechos, de respeto de igualdad.
Gracias a las que con sus gestas el terreno abonaron, en su memoria una generación competente se alza para que el mundo entero conozca su liderazgo.
