El pasado 3 de septiembre, decenas de turistas fueron testigos del operativo que se llevó a cabo en el centro histórico de la ciudad de Cartagena, el cual tenía como objetivo hacer efectiva la orden de desalojo en contra del reconocido restaurante Café del mar.
El lugar que contaba con más de 30 trabajadores, y que se había posicionado como un ícono del turismo en 'la heroica', tuvo que cerrar sus puertas luego de una larga disputa legal en la que un grupo de ciudadanos interpuso acciones debido a la ocupación del espacio público de una ciudad patrimonio como lo es Cartagena y sus murallas.
El alcalde Dumek Turbay, se refirió en sus redes sociales a lo ocurrido y le prometió a los ciudadanos la recuperación del espacio público para el disfrute de los cartageneros y turistas.
"¿Qué viene con el espacio restituído donde quedaba #CaféDelMar? Lo vamos a convertir en el mirador de contemplación público más bello de #Cartagena. Nadie será echado del lugar, ni tendrá que pagar por una cerveza de 30 mil pesos para tomarse una foto allí, o sentarse a tardear con sus amigos de la universidad", expresó el alcalde.
Turbay indicó que se encargará de supervisar la puesta en marcha para que el espacio que era ocupado por Café del mar se convierta en un gran mirador gratuito para que los cartageneros y turistas disfruten de la mejor vista de la ciudad.
"¿Qué les parece convertirlo en el espacio de contemplación más bello de #Cartagena? El baluarte Santo Domingo, en el cordón de muralla, era un espacio vetado para el cartagenero que vamos a recuperar, proteger, embellecer y poner en valor. ¡Será para la gente!".
¿Quiénes son los dueños de Café del mar Cartagena?
Según la página web de este importante proyecto gastronómico, en el año 2010 Café del Mar fue el primer Bar Restaurante, a nivel mundial en certificarse con el código de conducta de THE CODE de la UNICEF que busca la prevención de la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes en el contexto de viajes y turismo.
Además, dentro de su grupo de trabajo contaban con madres cabeza de hogar, algo que permitía fortalecer y dinamizar la economía local.
En cuanto a los propietarios de este restaurante, hasta el momento no se han pronunciado al respecto. Sin embargo, ha sido Jairo Morad, jefe operativo de Café del Mar, el encargado de hablar frente a los medios de comunicación y expresar su enojo por lo que él considera una decisión arbitraria.
Lo cierto es que toda esta situación ha generado gran división entre la ciudadanía. Por un lado, se encuentran quienes apoyan y celebran la recuperación del espacio público, mientras que por otro, hay preocupación por los empleos que generaba Café del mar y su importancia como atractivo gastronómico de la ciudad.
