Fue notificado de la orden de captura, con fines de extradición, por la Corte Distrital de los Estados Unidos para el distrito Sur de Florida, hacia ese país, en la cárcel distrital de Valledupar al ya detenido Andrés Fernando Pérez Restrepo, alias ‘Antrax’, quien hacía parte de las nuevas generaciones de narcotraficantes denominados los “babynarcos”.
Este criminal era considerado una persona de gran importancia en la estructura de la banda criminal del Clan Úsuga, en zona del mar Caribe. Fue jefe de esta organización criminal en el departamento de Sucre y a su vez era quien se encargaba de manejar toda la logística encaminada a la producción, transporte, acopio y envío de sustancias estupefacientes que tenían como destino los mercados de Centro América, México y Estados Unidos, donde se efectuaba su comercialización.
Su modus operandi consistía en almacenar el alijo en fincas de su propiedad, la ocultaba en caletas hasta completar la "cuota mínima", de 500 kilos. Posteriormente se iniciaba una operación catalogada como "hormiga" para movilizar los cargamentos hasta diversas playas del mar Caribe, y era enviada a Centro América y Estados Unidos.
Este curtido pero joven criminal, ingresó al mundo delincuencial a los 17 años ayudando a narcotraficantes con el envío de droga a través de lanchas rápidas go-fast desde el pacífico hacia Centro América.
A sus 27 años fue capturado por la DIJIN hace un año en el aeropuerto los Garzones de la capital de Córdoba, junto a 12 delincuentes más. Hoy a sus escasos 28 años de edad le espera condena en los Estados Unidos.
Su modus operandi consistía en almacenar el alijo en fincas de su propiedad, la ocultaba en caletas hasta completar la "cuota mínima", de 500 kilos. Posteriormente se iniciaba una operación catalogada como "hormiga" para movilizar los cargamentos hasta diversas playas del mar Caribe, y era enviada a Centro América y Estados Unidos.
Este curtido pero joven criminal, ingresó al mundo delincuencial a los 17 años ayudando a narcotraficantes con el envío de droga a través de lanchas rápidas go-fast desde el pacífico hacia Centro América.
A sus 27 años fue capturado por la DIJIN hace un año en el aeropuerto los Garzones de la capital de Córdoba, junto a 12 delincuentes más. Hoy a sus escasos 28 años de edad le espera condena en los Estados Unidos.
