Este 7 de septiembre se cumple el plazo de un mes que el presidente Iván Duque dio para tomar una determinación respecto a la continuidad de los diálogos con el ELN. El mandatario aseguró que la decisión se tomará a media noche y espera que sean entregados todos los secuestrados.
Durante la cumbre de gobernadores que se desarrolló en Mompox, el mandatario hizo referencia a la decisión que tomará en las próximas horas. "Frente al tema del ELN esperemos hoy la liberación de los demás secuestrados, yo les quiero decir a ustedes como presidente de los colombianos con mucha tranquilidad pero con firmeza: yo tengo toda la voluntad de avanzar hacia el desarme, la desmovilización y la reinserción del ELN", afirmó Duque.
Asimismo reiteró, como el día de su posesión el 7 de agosto, que las condiciones son el cese de actividades criminales. "No nos llamemos a engaños, necesitamos la suspensión de todas las actividades criminales empezando por la liberación de los secuestrados. Si esos hechos de buena fe, ocurren, se liberan y hay una suspensión de actividades criminales, el gobierno está listo para proceder, pero lo que no podemos es seguir validando la violencia como un mecanismo de acceso a la palabra del Estado", aseguró.
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La guerrilla del ELN emitió un comunicado el pasado 5 de septiembre en el que hizo referencia al asesinato de Alirio Arenas, líder social y concejal de Convención en Ocaña. También, criticaron el anuncio del presidente Iván Duque sobre reforzar el pie de fuerza en Tibú, Norte de Santander, tras un consejo de seguridad en la ciudad.
El último párrafo del comunicado hace una propuesta de continuación de las negociaciones. "Seguimos convocando al Gobierno Nacional (...) y a todos los sectores comprometidos con una salida política al conflicto social y armado en el país, y a todo el pueblo en general, a continuar los esfuerzos en la búsqueda de una verdadera paz con cambios y transformaciones".
El pasado 5 de septiembre, la guerrilla del ELN liberó a tres militares que habían sido secuestrados en Arauca, identificados como Orlando Yair Vega Díaz, Juan Pablo Rojas Ovando y Eduardo Caro Bañol. Ellos completaban un mes en manos de esta organización armada y fueron liberados con apoyo de la Defensoría del Pueblo. Aún hacen falta cuatro policías y dos civiles secuestrados en zona rural de Quibdó el pasado 3 de agosto, y al menos otras 18 personas de las que se desconoce su paradero. La condición del Gobierno es dejar libres hoy, 7 de agosto, a todos los secuestrados.
