
En una decisión calificada como histórica, el Congreso de la República aprobó en último debate el Proyecto de Ley 529 de 2025 Cámara – 218 de 2024 Senado, que establece el Código Deontológico y Ético del Entrenador Deportivo en Colombia. Esta norma, largamente esperada por el gremio, se convierte en un paso trascendental hacia el fortalecimiento y la profesionalización del deporte en el país.
El Representante Víctor Manuel Salcedo, coordinador ponente del proyecto, celebró el respaldo legislativo subrayando la importancia del nuevo marco legal para quienes han dedicado su vida al entrenamiento deportivo. “Reconoce la labor silenciosa, valiente y comprometida de quienes han sido pieza fundamental en la formación deportiva del país. Con esta norma avanzamos en el camino de la dignificación, la protección y la regulación ética del ejercicio de los entrenadores deportivos”, expresó Salcedo.

Uno de los avances más significativos de la ley es el reconocimiento oficial de los técnicos laborales en entrenamiento deportivo como entrenadores deportivos, un logro que beneficia directamente a más de 10.000 personas. Para estos trabajadores, la nueva legislación significa un respaldo jurídico y social que formaliza y legitima su labor dentro del sistema deportivo nacional.
Otra disposición clave es la ampliación del plazo para acreditar la idoneidad profesional, una medida que evita que más de 30.000 entrenadores enfrenten el riesgo de perder su empleo por no contar con la certificación exigida. Esta extensión no solo brinda un alivio a miles de familias, sino que también otorga tiempo para adaptarse a los nuevos requerimientos sin interrumpir procesos de formación deportiva.
Además, la ley incluye el reconocimiento especial a entrenadores con trayectorias destacadas a nivel nacional e internacional, resaltando su impacto en el desarrollo del deporte colombiano y ofreciendo visibilidad a figuras que han contribuido de manera significativa desde diferentes disciplinas y regiones.
Uno de los pilares fundamentales de la norma es la definición de un marco ético, disciplinario y profesional, que establece derechos, deberes, prohibiciones y procedimientos claros para los entrenadores deportivos. Con esta estructura normativa, se busca garantizar el ejercicio responsable y ético de la profesión, así como mejorar la calidad del acompañamiento técnico en todos los niveles del deporte.
La ley también contempla la creación del Tribunal Nacional de Ética en Entrenamiento Deportivo, organismo que será responsable de velar por el cumplimiento de las disposiciones éticas y disciplinarias establecidas. Esta entidad se convertirá en garante de la integridad profesional y en referente para la resolución de conflictos dentro del sector.
Finalmente, se institucionaliza el 23 de mayo como el Día Nacional del Entrenador Deportivo, una fecha que servirá para rendir homenaje anual a estos profesionales que trabajan a diario por el crecimiento del deporte en el país.
“Esta es una victoria para el deporte colombiano y para los miles de entrenadores que trabajan con pasión desde los territorios. Desde el Congreso seguiremos trabajando por un deporte más ético, justo y profesional”, concluyó el congresista vallecaucano.