El gobierno japonés donó a Colombia este jueves una suma de USD 4,5 millones para atender la crisis migratoria proveniente de Venezuela.
El dinero será invertido en programas ejecutados por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en el país.
Los recursos aportados por el país asiático estarán orientados a contribuir a los esfuerzos del Gobierno colombiano para "abordar las necesidades humanitarias de los refugiados y migrantes, los colombianos retornados y las comunidades de acogida impactadas por los flujos migratorios mixtos", dijo la Cancillería colombiana en un comunicado.
En el acto de firma del acuerdo estuvieron la ministra de Relaciones Exteriores (E) de Colombia, Luz Stella Jara, el embajador de Japón en Colombia, Keiichiro Morishita, el representante Acnur en Colombia, Jozef Merkx, y la jefa de Misión de la OIM en Colombia, Ana Eugenia Durán.
"Frente a la crisis migratoria venezolana, viendo todas nuestras capacidades nacionales desbordadas para atender las necesidades de estos migrantes, el Gobierno de Japón nos da una prueba más de solidaridad internacional", dijo Jara.
El embajador nipón, por su parte, dijo que su país atiende el llamado de cooperación internacional para apoyar las labores que ya venían desarrollando Acnur y OIM en el país, al tiempo que destacó la postura de Colombia, que "desde el inicio de la migración masiva, el Gobierno Nacional estableció una política de 'brazos abiertos' y ha priorizado la atención bajo el marco de los derechos humanos, a los cientos de miles de personas provenientes de Venezuela".
De acuerdo a la nota de prensa, las acciones de los organismos de Naciones Unidas incluyen la operación de centros de atención temporales para alojamiento, la prestación de servicios de transporte para procesos de reunificación familiar, así como en el mejoramiento de la infraestructura social para proveer servicios de calidad a refugiados, migrantes, retornados y comunidades de acogida, incluyendo personas con necesidades específicas de protección como víctimas de trata, abuso y explotación laboral, entre otros.
Según datos de la ONU, en Colombia hay alrededor de 1,3 millones millones de migrantes venezolanos. Después están Perú, con 768.000; Chile, con 288.000; Ecuador, con 263.000; Brasil, con 168.000 y Argentina, con 130.000.
