Este 30 de agosto fue radicado en el Congreso de la República el proyecto de ley con el que se dará vida a la nueva política de paz. Iniciativa de “paz total” con la que el presidente Gustavo Petro busca iniciar diálogos con diversos grupos armados del país.
La radicación, que fue realizada personalmente por el ministro del Interior Alfonso Prada, busca modificar la ley 418 de 1997, concerniente a los instrumentos para la búsqueda de la convivencia, además de dar vida a figuras como el Servicio Social para la paz y el Fondo para la Paz
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Tal y como lo señala el documento, su principal propósito es garantizar “la seguridad humana y la construcción de la “paz total”, en todo el territorio nacional por medio de la creación de regiones especiales de paz (al menos 9), en las zonas más afectadas por violencia en Colombia. Así mismo, pretende dotar de mayor poder a los alcaldes de municipios con presencia de grupos armados para entablar diálogos humanitarios que posteriormente, en instancias más altas, deriven en su desarme y desmovilización.
Estas “regiones especiales de paz” serán delimitadas por el Gobierno Nacional y algunos representantes designados por el mismo para avanzar en los diálogos con los grupos dispuestos a dejar las acciones violentas. Durante las conversaciones, y solo en las zonas designadas, se pausarán las órdenes de captura contra miembros participantes.
Así mismo, con el fin de garantizar que los esfuerzos de paz se prolonguen en el tiempo, el proyecto de ley pretende que el cumplimiento de los acuerdos alcanzados en las regiones especiales de paz sean de carácter obligatorio para los gobiernos venideros. Tal y como lo fueron los acuerdos de paz pactados con la extinta guerra de las Farc.
Entre los puntos que más han llamado la atención del documento presentado por el ministro Prada, destaca uno que plantea la creación de un “Servicio social para la paz”, que reemplazaría el servicio militar obligatorio y consistiría en el trabajo con comunidades víctimas del conflicto, la promoción de alfabetización digital y la protección de la biodiversidad.