Una gran controversia ha surgido tras la presentación de una oferta de contratación por parte de la Secretaría de Movilidad de Bogotá, en la que se busca comprar varios elementos para la “transformación de espacios de la Secretaría Distrital de Movilidad bajo el esquema de trabajo inteligente”, dentro de los que destacan mesas de futbolín, ping pong y boliranas.
La denuncia fue inicialmente realizada por medio de Twitter por el Concejal del Centro Democrático Andrés Forero, quien cuestionó que el secretario de Movilidad, Nicolás Estupiñan, “se preocupe por una transformación de espacios en Movilidad Bogotá que incluye puffs, tapetes de diseño y mesas de Bolirrana, Ping-Pong y Futbolín”. Eso, en medio de la austeridad de gasto público anunciada en el marco de la pandemia.
“¿Eso mejora la movilidad?”, preguntó Forero en un trino.
Por su parte, el secretario Nicolás Estupiñán, que por estos días estrenó con bombos y platillos los nuevos policías civiles de tránsito y las “zonas de parqueo pago”, defendió en una entrevista con Blu Radio su intención de compra en la medida en que estos espacios inteligentes podrían llegar a tener un efecto sobre “el estrés y la depresión” de los trabajadores, incrementados en tiempos de pandemia y del trabajo virtual.
Por esta razón, según la periodista de dicho medio que acompañaba a Estupiñán, el funcionario considera que la denuncia de Forero “no tiene presentación y le parece de mal gusto”, añadiendo que “es necesario que los equipos de capital humano tengan mayores inversiones y actividades para mejorar el clima laboral”.
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Frente a esta respuesta, Forero aseguró que seguirá en pie de lucha para tumbar esos gastos. Ambas posiciones, tanto en el marco de la emisora como en las redes sociales, se dividieron en dos grupos: aquellos que consideran oportuno, y hasta un derecho de los trabajadores públicos, tener instalaciones de trabajo que potencien su creatividad y productividad; mientras otros califican como innecesario gastar elevadas sumas de dinero en elementos de decoración y ocio para las oficinas de la entidad.
¿De qué va el contrato de los “espacios inteligentes”?
Al mejor estilo de las oficinas de “Google”, los espacios inteligentes que planea poner en marcha la Secretaría de Movilidad de Bogotá están pensados para que los empleados reduzcan el estrés laboral y potencien sus habilidades, ocupando de forma activa sus espacios libres con deporte y esparcimiento.
También cabe anotar que, al igual que en muchas empresas, los trabajadores llevan meses sin verse físicamente e incluso, en caso de las nuevas contrataciones, no conocen absolutamente nada del ambiente de trabajo o de los equipos. Inmersión que podría llegar a ser mucho más sencilla de la mano con espacios pensados para la socialización.
En ese orden de ideas, la Secretaría de Movilidad publicó una oferta de contratación de referencia SDM-PSA-SIE-083-2021 en el Secop II, por medio de la cual espera realizar la compra de los elementos que permitirán dicha transformación. Labor para la que se destinó un presupuesto de más de mil millones de pesos.
La lista detallada de objetos que se incluyen en dicho monto serían: dos mesas de futbolín, dos de bolirana y otras dos de ping pong, 20 alfombras y tapetes, ocho mesas de centro, 80 tableros acrílicos y 26 de vidrio, un archivo rodante mecánico, seis sofás de tres puestos y 15 de dos, 34 muebles tipo “puff”, entre otras cosas.
No obstante, lo que quizá ha generado mayor controversia es el precio de estos productos en algunas de las cotizaciones, sobre todo en lo que corresponde a todos aquellos ajenos a la decoración estética del lugar. Por ejemplo, en una de ellas los valores unitarios de estos productos serían los siguientes:
- Mesa de ping pong: $1’732.500
- Mesa de futbolín: 1’559.250
- Bolirana: 3’302.250
- Mueble tipo puff: 1’513.680
En caso de pagar dicha cantidad por cada uno de los artículos, que aún no es un certeza por cuanto obedecen solo a una cotización, el valor total pagado sería superior a los 64 millones de pesos. No obstante, cabe mencionar que generalmente las empresas que contratan en este tipo de cosas con el Estado deben cumplir con ciertos requisitos de calidad, por lo que es importante tener en cuenta eso al momento de valorar los costos.
Lejos de eso, aún queda esperar muchas respuestas sobre este tema por parte de las entidades, así como un pronunciamiento de la Secretaría de Movilidad que explique detalladamente el proyecto que desea poner en marcha en sus instalaciones. Por ahora, queda claro que la idea del secretario Estupiñán es seguir adelante con dicho gasto.
