El presidente Gustavo Petro firmó, pocas horas atrás, el decreto con el cual confirma la intención de su gobierno de recuperar, restaurar y poner en operación el Hospital San Juan de Dios. Uno de los centros médicos con más historia de la capital colombiana tras casi 5 siglos, varios años de abandono y un proceso de recuperación
De hecho, su historia se remonta a 1564 cuando, ante la necesidad de atención médica para los habitantes de Bogotá, era atendido por frailes dominícos y franciscanos luego de que el arzobispo Juan de los Barrios donara el terreno para la construcción del entonces Hospital de San Pedro, como se le llamó en un principio. A pesar de ello, no sería sino hasta 1723 cuando tras ser trasladado entre las calles 11 y 12 y entre las actuales carreras 9 y 10, sería formalmente fundado bajo el nombre de Hospital de Jesús, María y José.
A lo largo de su historia, además de atender a los actuales bogotanos y bogotanas, también atendió personas en situación de esclavitud durante La Colonia, heridos de las batallas durante la independencia y hasta víctimas de la Guerra de los Mil Días. Siendo sede donde por primera vez en la historia del país se hicieron prácticas como mastectomía, cesárea, parotidectomía.
Para la segunda mitad del siglo XX ya era considerado como uno de los centros de investigación y preparación médico-científica más importantes del continente en asociación con la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional.
Su crisis, no obstante, comenzaría en 1993 cuando sus recursos disminuyeron por cuenta de la Ley 100 que lo llevaron paulatinamente a suspender servicios hasta que, finalmente, en 2001, se ordenó su cierre definitivo.
Sin embargo, por cuenta de su trayectoria e importante papel en la historia tanto médica como arquitectónica del país, en el 2002 tanto el Hospital San Juan de Dios como el Instituto Materno Infantil fueron declarados como patrimonio histórico y cultural de la nación.
Desde entonces, y hasta la fecha, se han surtido varios procesos no tan fructíferos para devolver a la vida al Hospital San Juan de Dios, que entre sus problemáticas ha registrado debilitamiento estructural, embargos, ocupación por parte de extrabajadores, limitaciones por su conservación arquitectónica.
Ahora, entre los retos que le quedan en su camino a convertirse en un Hospital de Cuarto Nivel para el suroriente de la capital se encuentra la demolición y construcción de la torre central que se espera cuente con más de 300 habitaciones, casi 50 consultorios, 7 salas de cirugías y atención de urgencias.
En esa vía, el reciente decreto 1959 de 2023 firmado por el presidente Gustavo Petro le permitirá al gobierno nacional tomar posesión para la recuperación de la infraestructura del reconocido hospital y crear la figura de Hospital Universitario San Juan de Dios y Materno Infantil, un centro para la formación de nuevos profesionales médicos adscrito al Ministerio de Salud.
La recuperación del centro médico fue una de las promesas de campaña del presidente Gustavo Petro para la capital colombiana, y al respecto ha asegurado que lleva “media vida” tratando de volver a ponerlo en operación como uno de los puntos donde nació la salud pública en Colombia.
““A mí me sucedió (Enrique) Peñalosa y lo que pensó Peñalosa fue en cómo dinamitarlo y construyó un contrato con una firma española que tiene como objetivo, como objetivo no, pero una de sus cláusulas es demoler el San Juan de Dios, el edificio central y fusionarlo con el hospital Santa Clara (...) La Torre Central del Hospital San Juan de Dios, por ser patrimonio nacional, por Ley de la República, no se va a demoler, no se va a dinamitar, se tiene que restaurar como el patrimonio nacional que es. Eso lo prometimos en campaña y eso se tiene que cumplir”, refirió Petro a pocos meses de llegar a la Presidencia.
