El cable submarino AMX-1 tiene la capacidad de llevar internet móvil de alta velocidad y una mayor cobertura a la totalidad de la isla. El servicio beneficiará a los más de 62.000 habitantes y turistas que visitan la isla y además será un vehículo para jalonar el desarrollo del archipiélago.
El cable es una oportunidad para fortalecer la conectividad de San Andrés donde la penetración del servicio de Internet fijo residencial es 15,7%, porcentaje inferior al promedio de municipios similares en 9 puntos, de acuerdo con la CRC.
Con la llegada del nuevo cable submarino, la velocidad de internet móvil se aumentará en 1.000%. Además, los habitantes del archipiélago de San Andrés contarán con una mayor cobertura y acceso a internet de banda ancha.
En la inauguración, el presidente Iván Duque Márquez resaltó la importancia de la llegada del cable submarino a San Andrés:
“Le estamos cumpliendo hoy al archipiélago entregándole un cable submarino que va a multiplicar exponencialmente la capacidad de acceso a información y descarga. Esto no es un cable, esto es calidad de vida, es telemedicina, es educación virtual, mejores servicios a los turistas y por ende más turismo”.
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Con este avance se podrán realizar mejoras necesarias en términos de servicios de salud y telemedicina, comercio, educación y, sobre todo, a la reactivación del sector turístico, fundamental para el desarrollo y progreso de la isla.
El cable submarino cuenta con un lote de un área aproximada de 8.300 metros cuadrados, con una estación terrena en la zona de Schooner Bight. La extensión de la conexión AMX-1 de Claro a San Andrés tiene una longitud de 727 kilómetros, con dos puntos de aterrizaje (uno en la isla y el otro en Puerto Limón, Costa Rica) y dos pares de fibra que suman 20Tbps (terabites por segundo) más de capacidad.
El sistema principal de cable submarino fue instalado por América Móvil en 2013 para proporcionar enlaces de comunicación de alta velocidad entre EE.UU. (Florida y Puerto Rico), Jamaica, Colombia, Guatemala, República Dominicana, México y Brasil.
Este primer cable llegó (a nivel local) a Barranquilla y Cartagena para conectar a todo el país en abril de 2015, aumentando 50 veces la capacidad de conexión digital de Colombia con el mundo.
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El AMX-1 que llega a San Andrés transmite los datos mediante rayos láser (haces de luz), que se desplazan a lo largo de fibras de vidrio. Está diseñado con materiales que minimizan el impacto ambiental y la fibra óptica se acomoda en una carcasa de tubo de acero inoxidable rellena de aislante, rodeada de dos capas de cables de acero que forman una bóveda protectora contra la presión y el contacto externo.
Estos cables no emiten ningún tipo de radiaciones electromagnéticas, ni presentan riesgos de explosión, dilución o derrame de materiales peligrosos o contaminantes al medio marino. Según la Encuesta Nacional de Calidad de Vida, para el 2018 en San Andrés menos de la mitad de los hogares contaban con internet, y solo el 37,9% de habitantes tiene internet fijo y móvil.
Adicionalmente, la penetración del servicio de Internet Fijo (por cada 100 personas) es tan sólo del 5,4% en el archipiélago. Con este proyecto se fortalecerá la infraestructura TIC puesto que también habrá un mayor cubrimiento en la red de banda ancha con tecnologías 4G y 4.5G, que fortalecerá la interconectividad entre las islas del archipiélago y habrá mejores tarifas en los servicios.
