Publicado por: michell.figueroa el Mié, 13/01/2021 - 08:18
Tras ser rescatado y estar un año en proceso de rehabilitación, las autoridades liberaron a un ocelote en el Magdalena Medio antioqueño.

Las autoridades de Antioquia liberaron recientemente a un ocelote que permanecía en rehabilitación desde hace un año, tras ser rescatado. 

Al animal, de la especie Leopardus pardalis, se le instaló un collar de rastreo por telemetría satelital, el cual ha permitido conocer que continúa con vida y desplazándose en el bosque.  


El felino fue encontrado hace más de un año por una familia en el oriente de Antioquia cuando aún era una cría. Esas personas decidieron quedarse con él y lo criaron junto con perros y gatos. El alimento que le suministraban era concentrado.

El ocelote, aun infantil, fue entregado por sus tenedores de manera voluntaria en enero del año pasado al Área Metropolitana del Valle de Aburrá en el municipio de Envigado. Desde ese momento la entidad junto con Corantioquia, la Universidad CES y la Cooperativa Precoodes, trabajaron en la rehabilitación del ocelote. 

A su ingreso al Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre, el felino pesaba solo tres kilogramos y tenía parásitos intestinales y abundantes pulgas, para lo cual se le dio el tratamiento respectivo. 

Durante un año, el animal silvestre vivió un proceso de rehabilitación con el que se buscó que aprendiera las conductas que de manera natural debió enseñarle su madre. 

Personal experto en biología, medicina veterinaria, zootecnia y operarios participaron en este proceso dirigido a que el ocelote aprendiera a identificar y conseguir su alimento, encontrar refugio y evitar situaciones que pusieran en riesgo su vida. 

También fue fundamental generarle conductas de repulsión y huída ante la presencia humana, con el fin de evitar que vuelva a ser capturado o que acuda a viviendas en busca de alimento

Collar de rastreo para conocer su ubicación

El dispositivo de rastreo que se instaló en el cuello del felino previo a su liberación, está diseñado para emitir una señal de ubicación cada cuatro horas, lo cual permite conocer la cantidad, lugares y amplitud de movimientos que realiza este ocelote. 

El collar está programado para desabrocharse automáticamente cuando se cumplan seis meses de rastreo, según informó el Área Metropolitana.

Durante los primeros días de monitoreo, se pudo establecer que el felino se ha desplazado ocho kilómetros a través de zonas de bosque bien conservado que son su zona de distribución natural, donde puede encontrar presas, fuentes de agua y vegetación suficiente para desplazarse y refugiarse. 


Los datos obtenidos permitirán confirmar la efectividad del trabajo de rehabilitación y buscar oportunidades de mejora, con el fin de garantizar cada vez mejores condiciones de preparación para los animales silvestres recuperados por las autoridades ambientales.

En el proceso de rehabilitación y liberación, las autoridades también trabajaron varias capacitaciones con la comunidad para evitar que ataquen a estos animales o los recapturen.