Diomedes Díaz murió en Valledupar un 22 de diciembre del año 2013 con tan solo 56 años de edad. ‘El Cacique de la Junta’ murió tranquilo en su casa, en la que vivió por muchos años y que ahora se ha convertido en símbolo para todos los que escuchan su música. Varias mujeres aún se disputan la propiedad del inmueble.
La casa fue comprada por Diomedes en el año 1996, cuando su pareja era Betsy Liliana González. En ese momento la casa tenía un valor cercano a los 60 millones de pesos, pero hoy por su historia el valor es incalculable.
Diomedes Díaz vivió gran parte de su vida en esa casa. La novela en su honor y personas cercanas al cacique muestran que le gustaba mucho y era su guarida, pues allí le gustaba ‘desenguayabar’ y estar tranquilo, pues en ese lugar nadie lo molestaba.
Por el cariño que tienen miles de vallenateros por Diomedes y su música, esa casa se volvió un punto de reunión para los seguidores del artista que continuamente llegan de todas partes de Colombia y el mundo sólo para pisar el mismo suelo en que estuvo el cacique y rendirle homenaje.
Tras la muerte de Diomedes, comenzaron los problemas familiares por todos sus bienes, especialmente por esa casa. La vida sentimental de Diomedes Díaz que dejó varios hijos y esposas, muchos de ellos sin reconocer, se ha vuelto en un lío jurídico muy difícil de resolver para la justicia colombiana.
La primera que aparecía en la lista como propietaria era Betsy Liliana González, conocida como ‘La Doctora’, gracias a un fallo judicial en el Juzgado Primero de Familia de Valledupar que la reconoce como la única dueña de esa vivienda ubicada en el barrio Los Ángeles de la capital del Cesar. Además de otras propiedades que consiguió Diomedes Díaz cuando sostuvo la relación con ella.
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Sin embargo, en el momento de hacer la reclamación allí seguían viviendo la última esposa y por ende viuda de Diomedes Díaz, llamada Luz Consuelo Martínez junto a Katiuska y Carmen, hijas de Diomedes.
Al morir el cantante, la viuda del artista tomó posesión de la casa que se encuentra en disputa legal con Betsy Liliana González. Hasta el momento, el proceso jurídico continúa sin dirimirse ya que no se ha logrado esclarecer a cuál de las dos mujeres pertenece la propiedad.
Quien logre quedarse con la vivienda, logrará un activo al cual se le puede sacar provecho en materia de turismo por el interés de muchos de conocer de primera mano el lugar en el que vivió su ídolo Diomedes Díaz.
