Un informe de la ONU advirtió que en el 2018 el mundo generó más de 50 millones toneladas de residuos electrónicos. Según la organización esto equivale al peso de todos los aviones comerciales jamás construidos. Esta cantidad de residuos es una amenaza para la salud de las personas y deterioro del medio ambiente.
Restos de computadoras, electrodomésticos, teléfonos, baterías han sido tirados a la basura sin pasar por el respectivo proceso de reciclaje. Según el informe: "los productos eléctricos y electrónicos usados contienen sustancias peligrosas, además materiales valiosos, por lo que requieren un tratamiento especial".
Cuando no se recicla estos desechos tecnológicos pueden causar lo siguiente: en primer lugar, se pierdan materiales que puedan ser recuperados, reciclados y utilizados como materias primas secundarias para nuevos productos.
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En segundo lugar, la ONU advierte que cualquier producto eléctrico "puede contener metales preciosos como el oro, el cobre y el níquel, (...) y cualquiera de los 60 elementos de la tabla periódica pueden ser encontrados en un teléfono inteligente", lo que significa que los residuos pueden estar contaminados con sustancias toxicas.
Con esta información la organización quiere hacer un llamado de atención para contrarrestar y realizar acciones urgentes, las cuales impidan la acumulación de residuos electrónicos. La ONU asegura que es un gran reto porque "un solo producto puede estar hecho de más de 1000 sustancias diferentes".
Los expertos de la ONU hacen referencia a estas sustancias porque la mayoría de los desechos son de tecnología antigua. "Hay millones de tubos de rayos catódicos de televisores y monitores antiguos, cintas VHS y reproductores de DVD que contienen compuestos tóxicos como el plomo, el cadmio y el mercurio, que los convierten en peligrosos y problemáticos", afirma los expertos.
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Según la organización es necesario la creación de plantas de reciclaje formales, las cuales pueden proporcionan oportunidades de trabajo seguro, acreditando a mil de trabajadores alrededor del mundo.
Estos centros o plantas de reciclaje pueden darle un gran valor económico en los residuos electrónicos, en particular de materiales como oro, plata, cobre, platino, paladio, entre otros, afirma el documento de la ONU.
"Recientes estimaciones, los desechos electrónicos están valorados en 62.500 millones de dólares anuales, más que el PIB de algunos países. Es también tres veces el valor de la producción de todas las minas de plata del mundo", concluye el informe entregado por la organización.
Finalmente dentro de la información entregada por la ONU, admite que estos residuos si no tienen el debido proceso de reciclaje puede causar cáncer en las personas que están en constante contacto con los desechos. En el caso de las mujeres que están en embarazo puede ocasionar abortos espontáneos y partos prematuros, también reducción de peso y tamaño de los bebés.
Los residuos tecnológicos no son el mayor porcentaje de basura solida que existe en el mundo pero si representa el 70% de los desechos más tóxicos que acaban en basureros comunes. Por esta razón es importante visibilizar el problema y crear estrategias para que el medio ambiente y la salud de los seres humanos no corran riesgo.
