
Después de años de transformación y un exitoso regreso en 2024, Victoria’s Secret Fashion Show 2025 prepara su gran aterrizaje en Nueva York, y ya hay expectativas altísimas: la marca anunció a través de sus redes sociales a las primeras seis modelos que protagonizarán el renovado desfile, marcando una nueva era para la pasarela más icónica del mundo de la moda.
El desfile de este año promete ser uno de los eventos más vistos de la década. En un momento en el que la moda abraza nuevamente el maximalismo, los eventos en vivo retoman protagonismo en las plataformas digitales, y la nostalgia por los años 2000 está más fuerte que nunca, Victoria’s Secret busca recuperar su trono fusionando su legado con una visión moderna, diversa e inclusiva.
Las primeras seis Ángeles confirmadas reflejan justamente esa dualidad entre la herencia y la innovación:
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Adriana Lima, la supermodelo brasileña que definió una era del show, vuelve para despertar la nostalgia de toda una generación.
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Lily Aldridge, otra de las figuras emblemáticas de la década pasada, se suma para conectar el pasado con el presente.
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Joan Smalls, referente internacional y veterana de la pasarela, aportará su elegancia y presencia imponente.
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Anok Yai, primera modelo negra de origen sursudanés en abrir desfiles de alto nivel, representará el poder transformador de la industria.
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Alex Consani, influencer y modelo de la Generación Z, lleva al escenario una nueva energía, autenticidad y sentido del humor.
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Yumi Nu, modelo y activista por la inclusión corporal, rompe los moldes tradicionales y reafirma el compromiso de la marca con la diversidad real.
Una pasarela con historia... y con polémicas
Durante más de dos décadas, el Victoria’s Secret Fashion Show fue uno de los espectáculos más influyentes del mundo. A lo largo de los años, fusionó lencería de lujo con presentaciones musicales de estrellas como Justin Bieber, Bruno Mars, Selena Gomez y Cher, y convirtió a las "Ángeles" en celebridades globales.
Sin embargo, con los cambios sociales y culturales de los últimos años, la marca se enfrentó a fuertes críticas por su falta de diversidad e inclusión. En 2019, el show fue cancelado en medio de polémicas y un evidente desgaste de su modelo de negocio. Desde entonces, Victoria’s Secret ha trabajado por reinventarse: incorporó modelos de diferentes tallas, etnias y trayectorias, renovó su liderazgo con más presencia femenina, y cambió su discurso de marketing hacia el empoderamiento y la autenticidad.