Si hay algo para hacer en la vida, es viajar, recorrer el mundo, no solo para tener la oportunidad de decir “estuve ahí”, también para entrar en contacto con diferentes culturas, para abrir los ojos ante paisajes con los que solo se podrían presenciar en sueños.
Por tal motivo, KIENYKE.COM le siguiere visitar Ausangate, la montaña de los siete colores en Perú.
Sudamérica, ofrece una extensa y rica variedad de destinos, naturalmente, Perú es uno de los que más resalta, no solo por su caminata en el mítico Machu Picchu, pero también por sus más misteriosas locaciones.
A 100 kilómetros de Cuzco, en el pueblo de Pitumarca, en el camino al Nevado Ausangate, a una altitud de 5.200 metros sobre el nivel, se encuentra Vinicunca, una montaña que alberga la maravilla protagonista, una que posee siete colores, haciendo alusión al arco iris.
Los tonos surreales que muestra la montaña se deben a los minerales expuestos en la zona, hablando de óxidos de hierro, sulfatos de cobre, entre otros.
Ausangate tiene un gran significado para la cultura local, por ejemplo, para los incas, ellos creían que de esta montaña surgía la energía masculina que fertilizaba a la Madre Tierra y de la misma manera, peregrinaciones actuales, como la de los pastores de la comunidad Tillca.
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Se recomienda ir a la montaña arco iris de Perú para las fechas de agosto, que es la temporada seca, donde es más probable que el panorama esté despejado y se puedan apreciar mejor sus colores.
Muchas agencias de viajes ofrecen el paquete, donde se le da desayuno y almuerzo, además de atención en toda la caminata. El paseo hasta la montaña puede ser algo pesado si usted no está acostumbrado a los caminos en subida o vive en una ciudad de poca altura, por lo que también está la opción de ascender a caballo, alternativa ofrecida en todo el recorrido.
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Vaya abrigado y con protector solar de alto factor. La subida es de, alrededor, dos horas. Un vuelo de ida desde Bogotá hasta Cusco puede costar COP$ 1.200.000 por estas fechas.
Sudamérica, ofrece una extensa y rica variedad de destinos, naturalmente, Perú es uno de los que más resalta, no solo por su caminata en el mítico Machu Picchu, pero también por sus más misteriosas locaciones.
A 100 kilómetros de Cuzco, en el pueblo de Pitumarca, en el camino al Nevado Ausangate, a una altitud de 5.200 metros sobre el nivel, se encuentra Vinicunca, una montaña que alberga la maravilla protagonista, una que posee siete colores, haciendo alusión al arco iris.
Los tonos surreales que muestra la montaña se deben a los minerales expuestos en la zona, hablando de óxidos de hierro, sulfatos de cobre, entre otros.
Ausangate tiene un gran significado para la cultura local, por ejemplo, para los incas, ellos creían que de esta montaña surgía la energía masculina que fertilizaba a la Madre Tierra y de la misma manera, peregrinaciones actuales, como la de los pastores de la comunidad Tillca.
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Se recomienda ir a la montaña arco iris de Perú para las fechas de agosto, que es la temporada seca, donde es más probable que el panorama esté despejado y se puedan apreciar mejor sus colores.
Para esto, se recomienda viajar muy temprano desde Cusco, y en lo posible, contactar un guía que le lleve a la montaña.
Muchas agencias de viajes ofrecen el paquete, donde se le da desayuno y almuerzo, además de atención en toda la caminata. El paseo hasta la montaña puede ser algo pesado si usted no está acostumbrado a los caminos en subida o vive en una ciudad de poca altura, por lo que también está la opción de ascender a caballo, alternativa ofrecida en todo el recorrido.
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Vaya abrigado y con protector solar de alto factor. La subida es de, alrededor, dos horas. Un vuelo de ida desde Bogotá hasta Cusco puede costar COP$ 1.200.000 por estas fechas.
