
El concejal Humberto ‘Papo’ presentó un proyecto que busca convertirse en acuerdo de ciudad con el fin de enfrentar el creciente problema de los vehículos mal parqueados en Bogotá. Según explicó en entrevista con KienyKe.com, la iniciativa no solo apunta a reforzar los controles, sino también a fomentar conciencia ciudadana, aplicar tecnología y ampliar las alternativas de parqueo regulado.
Le puede interesar: Así se tejió un entramado de espionaje en la seguridad de Petro
El problema del parqueo en Bogotá
De acuerdo con el concejal, la capital cuenta con un parque automotor de 2,5 millones de vehículos, una cifra que aumenta cada año debido a las exenciones del pico y placa para carros eléctricos e híbridos, así como por la posibilidad de pagar la desgravación.
Esta situación, sumada a la falta de cultura vial, ha convertido a la ciudad en un “parqueadero a cielo abierto”, especialmente en sectores como la zona Rosa, la zona G, los San Andresitos o Fontibón. Papo señaló que muchos conductores, e incluso quienes se movilizan con chofer, dejan los carros en las vías sin importar la congestión que generan.
“El primer objetivo de este acuerdo es generar conciencia ciudadana. Bogotá no aguanta más trancones por cuenta de la indisciplina”, enfatizó.
Normas claras y parqueo autorizado
El concejal recordó que el Código Nacional de Tránsito es claro: está prohibido estacionar desde una señal en adelante y no es cierto que donde no haya señalización se pueda parquear libremente. Lo permitido es únicamente detenerse para dejar o recoger pasajeros, pero no abandonar el vehículo en la vía.
En la ciudad, explicó, solo existen dos modalidades válidas: los parqueaderos en vía (conocidos como zonas azules) y los fuera de vía, en su mayoría privados. “Si alguien quiere estacionar, debe hacerlo en esos lugares y pagar la tarifa correspondiente”, recalcó.
Ejes del proyecto
El acuerdo busca actuar en tres frentes principales:
- Operativos más frecuentes contra los mal parqueados, en coordinación con la Secretaría de Movilidad.
- Uso de tecnología, con cámaras que detecten infracciones y un aplicativo ciudadano para reportar vehículos mal estacionados mediante fotografías.
- Ampliación de zonas azules, habilitando parqueaderos en vía en calles que lo permitan, con cobro regulado.
Según el concejal, la propuesta ya superó su primer debate en la Comisión del Plan del Concejo y cuenta con respaldo de ponentes.
Tecnología y participación ciudadana
Un punto innovador es el aplicativo digital. Con esta herramienta, cualquier ciudadano podría reportar a los mal parqueados y alertar a la Secretaría para que actúe. Papo aclaró que el propósito no es “multar por multar”, sino crear conciencia y mejorar la movilidad.
Asimismo, cuestionó las actuales cámaras de velocidad, que en su criterio sancionan con parámetros “irrisorios” y afectan injustamente a los conductores. “No estoy en contra de las cámaras, estoy en contra de las velocidades que fijaron sin estudios serios”, aseguró.
Alternativas y conciencia ciudadana
El concejal fue enfático en que Bogotá sí tiene suficientes parqueaderos, tanto en vía como fuera de vía, pero muchos ciudadanos no quieren pagar. “Quien tiene carro debe asumir el costo del parqueadero”, afirmó.
Además, criticó la costumbre de algunos taxis y conductores de plataformas que convierten calles cercanas a clínicas o zonas de alto flujo en “centros de acopio”, ocupando espacio público y generando más trancones.
Finalmente, hizo un llamado a la coherencia ciudadana: “Muchos bogotanos viajan al exterior y cumplen todas las normas de tránsito, pero en su propia ciudad las ignoran. Eso no puede seguir pasando”.
Hacia un acuerdo de ciudad
Con más de 900 frentes de obra en marcha, incluida la construcción del metro de Bogotá, el concejal subrayó la urgencia de actuar. “Si seguimos estacionando en las vías, la ciudad colapsará aún más. Necesitamos fortalecer los controles y dar herramientas a la administración para enfrentar un problema que ya es insostenible”.
El proyecto ahora deberá surtir su trámite en la plenaria del Concejo de Bogotá, con la expectativa de convertirse en un acuerdo que transforme la movilidad y reduzca los efectos del mal parqueo en la capital.