La Alcaldía Mayor de Bogotá inauguró la primera escuela del cuidado para hombres. Un proyecto que le apuntas a que las labores de la casa sean compartidas entre hombres y mujeres.
Según la alcaldesa de la capital, Claudia López, la idea es que los hombres ahora hagan parte de los agentes de cambio que asuman las responsabilidades de cuidado en sus hogares. Frente a esto dijo que seis de cada diez hombres son participes del aseo y cuidado del hogar, mientras que nueve de cada diez mujeres lo hacen.
“Esta escuela es para aprender a cuidar de los hombres, de su salud emocional, de su felicidad espiritual, para que reconozcan sus emociones, que las vivían plenamente, a expresarlas de una manera equilibrada, correcta, tranquila y segura. Así vamos a tener relaciones interpersonales más sanas”, expresó la alcaldesa de Bogotá.
A través de Twitter, López señaló: "Necesitamos una transformación cultural para que las mujeres dejen de creer que el cuidado es responsabilidad única de ellas, y que los hombres no tienen la paciencia o el don para hacerlo. Con la Escuela Hombres al Cuidado que lanzamos hoy demostraremos que #ACuidarSeAprende!".
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¿Cómo funcionará la escuela?
La escuela móvil recorrerá las diferentes localidades de la ciudad para así llevar en interior expertos que pueda realizar una asesoría personalizada para hombres que quieran ser participes de las labores del hogar.
Funcionará los sábados y domingos de 8:00 de la mañana a 6:00 de la tarde y estará a servicio también en las Manzanas de Cuidado de Usme y Kennedy. Está conformado por cuatro módulos y 24 sesiones que serán guiadas por un equipo de formadores y formadoras expertas en cuidado emocional, directo, indirecto y en cuidado ambiental.
La Encuesta Nacional del Uso del Tiempo (ENUT) del 2017 arrojó que, en Bogotá, las mujeres emplean tres horas y 11 minutos más que los hombres en el desarrollo de las actividades del cuidado no remunerado al interior de sus hogares.
Frente a esto la alcaldesa fue enfática en que, “las mayores víctimas de violencia sexual e intrafamiliar, en efecto son las mujeres; pero las mayores víctimas de violencia emocional, de no sentirse queridos, amados, protegidos por sus pares hombres, que eran sus padres, son los hombres”.