Luego de que las 15 comunidades que se encontraban viviendo en el Parque Nacional desde hacía varios meses conversaran con diversas entidades de orden distrital y nacional, se logró llegar a un acuerdo que satisfizo a los indígenas y se dispusieron las condiciones para su reubicación.
Las conversaciones fueron efectuadas por la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría General de la Nación, la Personería de Bogotá, el Ministerio del Interior, la Comisión de la Verdad y las Autoridades Indígenas de Bakata, figura que reúne a los representantes de todos los colectivos que se encontraban ocupando ese punto de la ciudad.
Algunos de los puntos más importantes a los que se llegaron durante la mesa de diálogo fueron los siguientes: Las comunidades deberán permanecer en el Parque La Florida mientras el retorno a sus territorios se realiza de manera satisfactoria, las personas que deseen quedarse en Bogotá podrán hacerlo en ese sitio y el distrito deberá garantizar las condiciones para que su desarrollo psicosocial sea óptimo y el gobierno nacional deberá girar los recursos necesarios para que las comunidades puedan plantear iniciativas productivas y de vivienda acorde a su contexto social, político y cultural dentro de sus asentamientos de origen.
“El Distrito ha puesto todo el interés para que este traslado se dé en condiciones seguras, se brinden las condiciones necesarias y se otorgue la asistencia alimentaria debida a las comunidades indígenas mientras son trasladados a sus territorios por parte de la Unidad Nacional para las Víctimas” afirmó Daniel Camacho, subsecretario de gobernabilidad de Bogotá.
Así pues, en primera instancia 203 indígenas fueron trasladados en buses desde el Parque Nacional hasta la vía Cota, Cundinamarca, lugar donde queda ubicada la UPI de la Florida. Posteriormente, se dio a conocer que 475 personas de un total de 1.000 han sido trasladadas satisfactoriamente.
Por lo pronto, las labores continuarán hasta lograr la finalización del procedimiento que está bajo la veeduría de las instituciones nacionales y distritales involucradas. Las Autoridades Indígenas de Bakata por su parte manifestaron que se sienten satisfechas con lo pactado y esperan que las entidades cumplan con los puntos conversados en la mesa de diálogo.
Cabe recordar que las 15 comunidades arribaron a Bogotá hace más de 7 meses y que su situación no había sido solucionada por las autoridades distritales ya que los intentos de conversación habían sido infructíferos. Además, la problemática escaló a enfrentamientos con el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) y la declaratoria de un emergencia humanitaria que denunciaba la negligencia de las instituciones para atender su problemática
Con estas nuevas disposiciones se espera que los indígenas puedan retornar a sus territorios bajo el acompañamiento que el estado colombiano les garantizó durante las conversaciones que tuvieron lugar en Bogotá.