Después de que el gobierno de Gustavo Petro interviniera a la EPS Sanitas, que cuenta con alrededor de 5.700.000 afiliados, bajo el ala de la administración estatal quedará el acceso a atención médica de millones de personas.
Antes de que se realizara esta última acción, desde el gobierno de Gustavo Petro ya se habían intervenido otras cinco EPS, Salud Savia Salud, Asmet Salud, S. O. S., Emsanar y Famisanar. En conjunto, estas manejaban alrededor de 9.827.470 afiliados.
Con esta nueva intervención, sumado a los afiliados que actualmente reciben su servicio de salud con la Nueva EPS, bajo el control del estado quedaría el acceso a atención a la salud de alrededor de 25.724.996 colombianos.
Cabe resaltar que, una vez estas empresas son intervenidas, su manejo queda en manos de la Superintendencia de Salud por un tiempo establecido, con el motivo de que, en este lapso, su servicio mejore.
No obstante, varios expertos en el tema aseguran que, en la mayoría de los casos, estas medidas no funcionan debido a la falta de auditorias y control que ejercen sobre las personas encargadas.
Por ejemplo, en entrevista con el periódico El Tiempo, Gustavo Morales, presidente ejecutivo de Fasecolda aseguró lo siguiente: "En la mayoría de los casos las intervenciones terminan en desastre porque, como no hay una junta directiva ni revisor fiscal, el interventor termina siendo un dictador y eso casi nunca termina bien. Ojalá este no sea el caso de Sanitas".
Cabe resaltar que, además de los usuarios, estas compañías también manejan billones de pesos anuales, entre lo que pagan los usuarios y lo que da el gobierno por cada afiliado que busque los servicios de la empresa.
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Se estima que, al momento de la intervención, Sanitas manejaba anualmente alrededor de 10 billones de pesos y es la segunda EPS más grande a nivel nacional, compitiendo con grandes compañías como Sura y Compensar.
Según la Superintendencia de Salud, las razones detrás de la intervención estatal fueron las siguientes: "el incumplimiento de los requisitos financieros de habilitación y otros factores analizados en el comité de medidas especiales desarrollado al interior de la superintendencia".
Cabe resaltar que, desde la misma entidad, se aseguró que los afiliados a Sanitas no sentirán ningún cambio en el servicio ni se verán afectado por la decisión tomada por el gobierno nacional.
