David Schmitt es el fundador del International Sexuality Description Project de la Universidad de Bradley. Allí, en medio de un ambiente académico ha hecho una serie de hallazgos muy curiosos sobre la evolución y las tendencias de la sexualidad humana. En su último estudio, investigó cuáles son los países más promiscuos del mundo. Sus variables fueron el número de parejas sexuales en el último año, el número de parejas que una persona cree que podría tener en los próximos cinco años, el número de encuentros sexuales que se han tenido en la primera cita y el número de fantasías sexuales con personas que no han sido su pareja sexual. Además, hizo un cuestionario en el que de una escala del 1 al 10 se calificaban estos escenarios: “¿qué tanto estarías de acuerdo con que el sexo sin amor está bien?”. “¿Puedo imaginarme teniendo sexo con múltiples parejas y disfrutándolo?”. “¿Tengo que estar en una relación emocional para sentirme cómodo y disfrutar del sexo?”.
Así, con estas herramientas hizo encuestas alrededor del mundo y encontró varios datos curiosos, como que México es más fogoso que España, Italia y Canadá, países donde el influjo religioso y la tradición cultural y política (el señor Berlusconi, por ejemplo) darían para pensar lo contrario. Sin embargo, el hallazgo más relevante tiene que ver con que habría una relación entre el ingreso per cápita y la promiscuidad, con excepciones como Bolivia y Bélgica. Este es el cuadro que arrojó el estudio, y en el que Colombia no aparece.