Durante más de cuatro décadas, Margarita Rosa de Francisco ha sido una las figuras más visibles de la televisión colombiana. Su trayectoria como actriz y presentadora la consolidó como un referente del entretenimiento nacional antes de radicarse en Estados Unidos, donde emprendió nuevos proyectos personales y profesionales junto a su pareja, Will van der Vlugt. A pesar de la distancia, ella continúa opinando activamente sobre la realidad política y social del país.
Su postura crítica frente a distintos temas la ha mantenido en el centro del debate público. Aunque apoyó abiertamente a Gustavo Petro durante las pasadas elecciones presidenciales, en los últimos meses la caleña ha manifestado desacuerdos con algunas de sus decisiones y declaraciones, especialmente en asuntos relacionados con la agenda social.
La más reciente controversia surgió tras conocerse señalamientos contra el empresario Ricardo Leyva, acusado de agredir a su esposa y de supuestamente usar audios y fotografías íntimas como mecanismo de chantaje. En respuesta a la ola de denuncias, el presidente Petro afirmó en su cuenta de X: “Yo no me meto en esas peleas. De ahí solo se sale aruñado por todas partes”, comentario que desató fuertes críticas en redes sociales.
Margarita Rosa de Francisco fue una de las voces que cuestionó la postura del mandatario, pidiéndole mayor claridad y responsabilidad frente a un caso de violencia de género. “El presidente Petro nos debe un pronunciamiento contundente en esta materia”, señaló la actriz, respaldando la preocupación de otros usuarios que exigían una respuesta más firme del jefe de Estado.
La autora también aprovechó el momento para subrayar la importancia de que la violencia contra las mujeres sea tratada como una prioridad nacional. En ese contexto, expresó su deseo de que un futuro gobierno —mencionando de manera hipotética a Iván Cepeda como próximo presidente— sitúe este tema al mismo nivel de urgencia que el cambio climático o la defensa de los derechos humanos.
