La pandemia del coronavirus alrededor del mundo ha obligado a las organizaciones deportivas a tomar medidas al respecto para evitar mayores contagios entre deportistas, seguidores y allegados a las disciplinas.
En las ligas de Italia e Inglaterra son varios los casos confirmados de futbolistas que arrojaron positivo por COVID-19.
Por esta razón, la FIFA, ente rector del fútbol mundial, recomendó a las distintas Confederaciones posponer los partidos internacionales que se tenían previstos para los meses de marzo y abril de este año.
Asimismo, la Mesa del Consejo decidió no aplicar las reglas generales que normalmente obligan a los clubes a liberar a los jugadores para los partidos de las selecciones nacionales.
"Recomendamos que todos los partidos internacionales previamente programados para marzo y abril se pospongan ahora, hasta el momento en que puedan llevarse a cabo en un entorno seguro, para jugadores y público en general", señaló a través de un comunicado.
La FIFA comprende que la situación actual por la que está pasando la humanidad no permite realizar espectáculos deportivos en ningún escenario, debido a que eso podría dejar graves consecuencias.
"No solo podrían presentar riesgos potenciales para la salud de los jugadores (y para el público en general) sino también, la integridad deportiva de dichos partidos", agregó.
Esta recomendación se realiza para evitar quebrantos de salud innecesarios en atletas de alto rendimiento. De igual forma para evitar "situaciones de posible injusticia deportiva", manifestó.
Hasta el momento, los únicos partidos internacionales de las selecciones nacionales que se han cancelado son los respectivos de las Confederaciones de Asia y América del Sur. Juegos que corresponden a las Eliminatorias para el Mundial de Catar 2022.
Por último, la FIFA anunció que estudiará las posibilidades de reprogramar cualquier partido pospuesto, además de encontrar soluciones apropiadas "para permitir que los partidos tengan lugar a su debido tiempo y con mínima interrupción", aseguró.
