Esta historia podría comenzar por el primer partido que se disputó el 22 de marzo de 1954, en el estadio Olímpico de la Universidad Central de Venezuela, ubicado en Caracas. Pero hay otra fecha que es determinante para el desarrollo de este texto: el 7 de noviembre de 1953.
La Federación Venezolana de Fútbol (FVF), la cual era dirigida por Fermín Huizi Cordero y Pedro Cabello Gibbs, propuso en la décima Conferencia de Interamericana de Cancilleres, con sede en Caracas, la disputa de un Campeonato Interamericano Juvenil, a la cual se invitara a los equipos de cuarta división de las confederaciones de fútbol que están en Sudamérica.
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El 8 de noviembre de 1953, se realizó la propuesta formal ante la Conmebol en su Congreso Anual con sede en Paraguay. Ante esta solicitud, los dirigentes de ese entonces lograron llegar a un acuerdo para que se realizara este torneo por primera vez en la historia.
Una de las condiciones que se tomaron en cuenta fue que se debían presentar los jugadores que no sobrepasaran los 19 años (actualmente es hasta los 20 años). Por lo que la conformación de cada selección tenía esa condición principal.
En ese mismo Congreso de la Conmebol de 1953, se definió que la sede para este primer Campeonato Interamericano Juvenil (hoy Sudamericano Sub-20) fuera Venezuela, uno de los países que por la época no estaba tan fuerte en el fútbol. El estadio elegido fue el Olímpico de la Universidad Central de Caracas, allí se jugaron todos los encuentros, desde el 22 de marzo hasta el 13 abril de 1954.
Una vez definidos todos los temas administrativos y logísticos para este primer torneo, se definió el sistema que se utilizaría para conocer al campeón del certamen. Sin embargo, hubo algunos cambios al sistema inicial por la declinación de Argentina, que se fue para un Mundial Juvenil invitado por Alemania.
Bolivia tampoco participó y eso dejó a 8 selecciones nacionales juveniles en la competencia, por lo que la Conmebol decidió extender la invitación a Panamá, quien hace parte de la Concacaf.
De esta manera, el primer Sudamericano Sub-20 de 1954 tuvo a nueve selecciones, las cuales jugarían de la siguiente manera: Uruguay, Colombia, Chile y Ecuador en el grupo A y Panamá, Perú, Uruguay y Paraguay en el grupo B.
Sistema de juego para conocer el campeón del primer Sudamericano Sub-20
Los cuatro equipos de cada grupo jugaron entre sí, a un solo partido, para conocer los que quedaron en los primeros y los segundos puestos de cada zona, donde las dos selecciones que finalizaron en primer lugar accedieron al cuadrangular final. Por otro lado, las naciones en la segunda posición se enfrentaron a un partido único de desempate para conocer al tercer clasificado.
El cuarto cupo fue para la selección de Venezuela, la cual por ser anfitriona solo jugaría la fase final, a la espera de los otros tres cupos que tuvo este torneo, para definir al primer jerarca del fútbol juvenil en Sudamérica.
En el cuadrangular final, se jugaron partidos con el sistema de todos contra todos, entre las cuatro selecciones que accedieron a esta instancia, donde el campeón se definió con el mejor de las cuatro fechas.
La disputa del Sudamericano Sub-20
Ahora sí podemos regresar a esa fecha del primer párrafo: el 22 de marzo de 1954 dio inicio el primer Sudamericano Sub-20 de la historia, el cual inauguraron Uruguay y Colombia, con un marcador de 1-1, donde el primer gol del torneo lo marcó Manuel Pederson del conjunto uruguayo al minuto 1.
Al final de la primera fase, Uruguay fue el primero del grupo A y el segundo fue Colombia, mientras que en el grupo B el ganador fue Brasil y el segundo puesto lo ocupó la selección de Perú.
Para definir el último cupo para la ronda final, Perú y Colombia se enfrentaron en partido único de desempate, en el que se impuso la selección peruana con un solitario gol de Hugo Natteri.
En la definición del campeonato, la selección de Uruguay terminó adjudicándose el trofeo con dos victorias ante Venezuela y Perú, y un empate ante Brasil en la última fecha.
Han pasado 69 años desde la realización de este campeonato, pero su impacto en el fútbol sudamericano ha sido superlativo, ya que por allí han pasado las figuras más relevantes de este deporte y aunque muchas cosas han cambiado, el espíritu sigue latente por representar de buena manera a cada nación.
