América de Cali es, sin duda, uno de los tres equipos grandes del Fútbol Profesional Colombiano. Sus 15 títulos de Liga, su prestigio internacional —más allá de las cuatro finales de Copa Libertadores que se esfumaron de forma insólita— y su numerosa hinchada hacen de la escuadra ‘escarlata’ una de las más poderosas del país.
América es noticia por una presunta deuda de salario a sus jugadores, como afirmó el presidente de Acolfutpro, Carlos Puche González, en entrevista con El Corrillo de Mao.
¿Las razones? Si bien el equipo americano ha tomado decisiones financieras que hoy lo podrían tener ahogado, como fue la contratación millonaria —fuera de contexto para el balompié nacional— de Juan Fernando Quintero, que terminó por ser una pesadilla digna del averno, lo peor no es esto. Lo que realmente sorprende es el poco acompañamiento de la hinchada de los ‘diablos rojos’ en este 2025.
El divorcio entre Tulio Gómez, máximo accionista del equipo, y la hinchada es evidente. Sin embargo, el equipo estuvo en cuadrangulares y el Pascual Guerrero era un estadio más cercano al purgatorio que al infierno que fue hace algunos años.
El principal ingreso de un equipo de fútbol en Colombia es la taquilla en sus partidos de local, y si la hinchada abandona, todo se hace más difícil. ¿Debería ser así? No. Colombia no es un país de cultura futbolera y no hay que ir muy lejos para entender la situación. En Argentina, Boca Juniors no participó durante dos años consecutivos en la Copa Libertadores y, aun así, cada fin de semana la mítica Bombonera estaba a reventar. En Europa también hay cientos de casos de equipos que atraviesan crisis deportivas y administrativas, pero sus hinchas siempre están. Aquí no.
Pero hay que hilar más delgado. Si uno ve el promedio de asistencia en el país en los últimos años, Nacional, Millonarios y Medellín están siempre punteando. Sus simpatizantes acompañan haya o no títulos. Existe la cultura del abono, un aspecto que en América no se ve presente, porque en Cali se vive de la “boleta suelta” y, si el equipo no va bien, pues a la cancha no se va.
¿Dónde queda la grandeza de América? Los ‘diablos rojos’ van a Bogotá y son acompañados; van a otras ciudades y se ve el poderío de su hinchada. Pero en su patio, en Cali, es costumbre ver, por mucho, 13.000 espectadores por juego y más de 25.000 cuando el equipo está en finales. Eso sí, siempre y cuando no exista un divorcio entre los hinchas y la dirigencia, como hoy en día sucede.
Hay muchas cosas por cambiar desde el lado dirigencial, pero desde el lado del hincha también. América no es el equipo más grande de Colombia y su hinchada tampoco es la más popular. Hace unos años lo era; hoy solo hay falta de ingresos por taquilla y muchas dudas deportivas y administrativas.
América era el equipo del pueblo; hoy es el club de nadie.
