El abogado que demandó a sus padres para que lo mantengan de por vida

Publicado por: gabriela.garcia el Vie, 12/03/2021 - 09:01
Conozca el caso de Faiz Siddiqui, un abogado que demandó a sus padres con el fin de que le paguen todos sus gastos de ahora en adelante.

La historia de un abogado que demandó a sus padres para que lo mantengan de por vida ha llamado la atención de la prensa internacional por sus curiosos detalles.

El protagonista en este caso es Faiz Siddiqui, un hombre de 41 años de edad que se graduó de abogado en la prestigiosa Universidad de Oxford, y quien emprendió una batalla legal en contra de sus progenitores Rakshanda y Javed, quienes viven en Dubai, con el fin de que le paguen todos sus gastos de ahora en adelante.

Según el Daily Mail, el abogado que demandó a sus padres no tiene empleo estable desde hace diez años, y, en la demanda alegó que tiene derecho a reclamarles la pensión alimenticia como un niño adulto "vulnerable" debido a que padece de diferentes problemas de salud.

El abogado que demandó a sus padres trabajó para una serie de bufetes de abogados después de graduarse de la universidad de Oxford.

Después perdió su empleo y, actualmente, vive sin pagar alquiler en un lujoso apartamento que es propiedad de sus progenitores ubicado en el centro de la ciudad de Londres, cerca al Hyde Park, el cual tiene un valor aproximado de 1,4 millones de dólares. 

Faiz Siddiqui argumenta que, si se le niega esta demanda para que sus padres lo mantengan de por vida, "se le estarían violando sus derechos humanos".

El portal digital asegura que sus padres le han estado proporcionando más de 400 libras a la semana y, además, lo han ayudado a pagar sus facturas. Los progenitores del abogado indican que su hijo es "difícil, exigente y pertinaz".

El caso fue trasladado al Tribunal de Apelación debido a que un juez del tribunal de familia lo rechazó el año pasado. 

El caso del abogado que demandó a sus padres se produce después de que Faiz Siddiqui intentara demandar a su antigua universidad "por una enseñanza espantosamente mala que le costó un título superior y una lucrativa carrera legal".

 

"El graduado de Oxford había calificado de 'aburrida' la matrícula y el hecho de que el personal estuviera en un período sabático prolongado significaba que solo recibió un 2,1 en lugar del título de primera clase que había querido. Sostuvo que esto le costó un lugar en un curso de derecho en una de las principales universidades de la Ivy League de Estados Unidos, como Yale o Harvard, y le negó la carrera legal de alto vuelo que había codiciado", indicó el Daily Mail.