Carl Barks no fue el creador del Pato Donald, pero sí el dibujante y guionista de historietas que hizo del personaje un hito en el mundo de dibujos animados de Disney. Le entregó al gruñón amigos, un lugar determinado y una personalidad.
Nació el 27 de marzo de 1901 en Merrill, Oregon, Estados Unidos. Si niñez la pasó en zonas rurales del país, donde no tenía vecinos o amigos que vivieran cerca, así mismo tenía que caminar largas jornadas para llegar a su escuela. Esa soledad que él mismo describía al narrar su niñez, pudo ser el detonante para que se interesara en esos vaqueros que firmes y jocosos afrontaban la soledad de los desiertos en las películas del género western que tanto le gustó desde pequeño.
No terminó la escuela por problemas auditivos y tuvo que afrontar en su juventud trabajos diversos para poder mantenerse y hacer algo productivo. Publicó en algunas revistas locales los dibujos que hacía incesante sobre cualquier lugar grabable, hasta que se postuló la compañía Walt Disney Studios, a la cual ingresó en 1935.
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Carl Barks recibió, tras un año de trabajo en los estudios de Disney, el famoso Pato Donald que hasta ese momento solo publicaba algunas caricaturas de un sheriff con carácter fácilmente exasperable que lanzaba tiros contra cualquiera. No hablaba y tampoco tenía personajes secundarios completos.
Decidió entonces reformarlo, no solo dándole un habla particular que cientos de generaciones oyeron durante décadas, sino también con la creación de sus sobrinos, Hugo, Paco y Luis, en un contexto nuevo para el cómic: Patolandia.
Carl Barks pensó que esa posición del personaje podría enriquecerse y para eso apeló a su experiencia personal. Siempre había visto a los patos como una caricatura del ser humano, por eso decidió ambientarlo con todas las sensaciones. "Donald es mi personaje favorito, porque es como todos mis amigos, mis vecinos, yo mismo, es solo el señor Everyman. Una de las mayores dificultades en el manejo de los personajes es determinar cómo reaccionará cada personaje ante una situación determinada. En ese sentido, el tío Scrooge es bastante fácil de mantener en línea. Él siempre elegirá la forma más barata de atender una emergencia", afirmó, según el portal IMDb.
Les agregó desde la experiencia personal características y situaciones reales llevadas a la caricatura, con un tono satírico, propio del género. Además consiguió que las aventuras del icónico Pato Donald giraran en torno a la avaricia, el enojo, la venganza, envidia, cinismo, desesperación y más sentimientos y comportamientos humanos. Eso permitió que el cómic fuera considerado una marca legendaria de la compañía Disney.
Carl Barks trabajó en ella, dibujando y produciendo los guiones, durante 25 años, hasta que se jubiló a los 65 años para dar paso a las nuevas generaciones en 1966. En ese momento ya era uno de los escritores del siglo XX más leídos en el mundo, con 450 cómics de su personaje más reconocido en la historia. Murió el 25 de agosto del año 2000.
Carl Barks, el hombre que perfiló al Pato Donald
Mié, 27/03/2019 - 14:42
Carl Barks no fue el creador del Pato Donald, pero sí el dibujante y guionista de historietas que hizo del personaje un hito en el mundo de dibujos animados de Disney. Le entregó al gruñón amigos,