Los parlamentos están buscando otro tipo de comunicación con la ciudadanía. No es opcional, es una obligación. Es importante contribuir a mejorar la calidad de la democracia, a través de buenas prácticas de acercamiento con la gente.
Aquí les presento las 10 tendencias más utilizadas en muchos Parlamentos, Asambleas y Congresos en diferentes países, que contribuyen a dotar de más apertura, el trabajo de los cuerpos colegiados.
Más comunicación directa: Se usan de forma asertiva las herramientas digitales, que sirvan para difundir aún más el trabajo legislativo, por ejemplo, que cada comisión tenga su propia web o sitio específico en el portal del Congreso.
Acciones de terreno: Descentralizar es otra de las facetas que está tomando mucha fuerza, que permiten al ciudadano sentir más cerca a sus congresistas.
Rendición de cuentas permanente: No se aconseja dejar para el final de la legislatura, este proceso de informar que se ha hecho. Las TICs permiten un proceso semanal de publicación de las actividades.
Participación ciudadana: Los Parlamentos Abiertos no deben quedarse solo en enunciados, la gente reclama más inclusión, ser escuchada y es prioritario generar las estrategias que así lo permitan.
Multiformatos: En la actualidad es equivocado quedarse en el clásico boletín institucional. La oferta de información debe ampliarse y adecuarse a todas las plataformas posibles.
Público joven objetivo: Es el sector de la sociedad con más apatía por la política y desde los Parlamentos es aconsejable impulsar una estrategia dirigida a ellos. Rejuvenecer la acción legislativa, es necesario.
Alianzas con organizaciones civiles: Son clave para perfeccionar los trámites legislativos, que validen los aportes en materia de leyes o debates que adelantan los cuerpos colegiados.
Formatos de cercanía: Los legisladores no deben generar distancia, es propicio producir microprogramas audiovisuales, que faciliten a la gente conocer exactamente la persona que los representa.
Parlamento 2.0: En la medida que se ofrezcan más herramientas de participación, el interés se incrementará. Una Comisión de Democracia Digital, sería por ejemplo, una buena alternativa.
Más pedagogía legislativa: Comprender y entender el técnico proceso legislativo, permitirá que la gente se interese más. Las capacitaciones son esenciales en esta idea.
Finalmente, la mirada interna es trascendental, las políticas de comunicación deben estar armonizadas y apuntar hacia el mismo lado. Esto se reflejará al público externo.
