Aunque el robo ocurrió el millonario pasado jueves, aún los habitantes de Ibagué, capital del Tolima, no dejan de hablar del hecho y de la inseguridad que se vive en la ciudad.
A través de las redes sociales varios ciudadanos de la capital tolimense aprovecharon la noticia mediática del robo de más de tres mil millones en esmeraldas, otras joyas y títulos valores, para criticar la alcaldía del exsecretario de salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, asegurando que la difícil situación en materia de seguridad, es culpa suya.
Así también lo asegura Carolina Rojas, la hija del empresario que víctima de robo. La joven declaró ante medios de comunicación: "Yo lo responsabilizo a él de lo que está sucediendo en Ibagué en este momento (la inseguridad) y él no está haciendo nada”, según lo indicó el portal de noticias, Rubendariocorrea.com.
Rojas, que fue candidata al Concejo de Ibagué, afirmó que Jaramillo no ha hecho mayor cosa por mejorar la seguridad: "El Alcalde está dedicado a perseguir vírgenes, mujeres, funcionarios, hacer show tapando un hueco, persiguiendo a la gente, a la oposición, a empresarios. Y mientras tanto de seguridad nada, estamos a merced de los hampones y las bandas delincuenciales".
El robo ocurió a plena luz del día y en un exclusivo sector de Ibagué, unos delincuentes sacaron de una casa tres cajas fuertes llenas con pagarés, joyas, esmeraldas y varios tipos de piedras preciosas. Los ladrones se llevaron cerca de 3.500 millones de pesos pertenecientes al empresario Jaime Rojas, que trabaja como agente deportivo y comerciante de joyas.
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El tremendo asalto tiene a toda la ciudad conmocionada por la facilidad cómo los sospechosos sacaron ante la vista atónita de algunos testigos las cajas fuertes, sin que la policía hiciera presencia o al menos reaccionara a tiempo.
En las horas de la mañana del pasado viernes, cuando unos individuos llegaron a la residencia vistiendo un overol azul y tapabocas. En sus espaldas cargaban unos tanque de fumigación. Los hombres entraron sin ningún problema asegurando que se trataba de una campaña de la alcaldía para prevenir los virus del zika, dengue y chikunguña.
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De un momento a otro lo asaltantes sacaron sus armas y amordazaron a los presentes, que en medio del pánico no tuvieron más opción que obedecer las órdenes que se les daban. En la sala de la casa fueron todos amarrados, mientras los delincuentes buscaban por toda la casa objetos de valor.
Un tiempo después los asaltantes encontraron tres cajas fuertes de máxima seguridad, las cuales intentaron abrir a la fuerza, utilizando infructuosamente varios elementos para forcejear la resistente cerradura. Las personas amarradas fueron cuestionados acerca de la forma de burlar la seguridad de las cajas, pero no encontraron respuesta.
En medio de su desesperación metieron las tres cajas en una camioneta blindada perteneciente al empresario, la cual fue robada. Se marcharon a prisa dejando a los empleados y visitantes de la residencia amarrados hasta que fueron encontrados por Jaime Rojas y su hija, Carolina.
Entre las personas que fueron amenazadas y amordazadas se encontraba un joven futbolista venezolano, cuya identidad se mantiene en reserva por cuestiones de seguridad.
Al pasar varias horas, la Policía Metropolitana de Ibagué encontró la camioneta abandonada en una calle de la ciudad, sin rastro alguno de los ladrones. Actualmente los uniformados se encuentran analizando el vehículo en busca de huellas dactilares o algún indicio que pueda dar con la identidad de los responsables del robo.
Se cree que numerosas bandas de delincuencia común provenientes de diferentes partes del territorio nacional actúan en Ibagué. A esto se suman las altas cifras de riñas en la ciudad.
La gestión de Jaramillo ha sido ampliamente criticada, entre otras cosas, por los problemas en el sistema de salud y la seguridad de la ciudad. También fue cuestionado por la terminación del contrato de una funcionaria del municipio sin razón aparente. Sindicatos de trabajadores aseguran que su condición de mujer fue la causa de su despido.
